¿Alguna vez has caminado dentro de un volcán? Desde luego suena impresionante, aunque claro, no hace falta que esté activo, no vayamos a acabar como Plinio el Viejo. Ni siquiera hace falta que esté "calentito", como ese mismo Vesubio que asfixió a Plinio y en cuya excursión por su cono, hoy, puedes oler el azufre e incluso ver algunas fumarolas escapando entre las rocas. 

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No hay azufre ni fumarolas en los volcanes de Catalunya. Por suerte, porque tras la experiencia reciente de La Palma, a pocos les apetecerá vivir cerca de un volcán activo. Pero hay que reconocer que los volcanes dan carácter, y en la provincia de Girona, en la comarca de La Garrotxa, contamos con una zona volcánica muy interesante. Y si te gusta el senderismo y las excursiones, aquí podrás recorrer una impresionante ruta por el interior de uno de esos volcanes. ¿Te vienes?

Rutas por el interior del volcán Croscat

El Croscat es el más joven de la cuarentena de volcanes que pueblan esta tierra y ha conocido dos erupciones. La primera, más fuerte y violenta, ocurrió hace 17.000 años, y la segunda, algo menor, hace 11.500 años. Aquella fue la última explosión volcánica ocurrida en la Península Ibérica.

Una etapa de la ruta en el volcán. Imagen: Abel García Villena, CC BY-SA 3.0.

Como volcán, sin embargo, no tendría nada más especial si no fuera por una cantera que se abrió en una de sus laderas y llegando a la parte superior, para la extracción de gredas y lapili, y que no se cerró hasta la década de 1990. Hoy, ese impresionante tajo de 500 metros de longitud y 100 metros de altura da al volcán un perfil único, y permite rutas excursionistas desde las que podrás ver las capas originales de lava, eso sí, oxidadas por la exposición al aire, lo que les da un aire rojizo único.

Por toda la zona hay un montón de rutas de senderismo distintas. Sin embargo, para ver el interior del Croscat, os proponemos dos opciones: una más corta si solo queréis ver el volcán y/o sois principiantes en esto del senderismo, y otra más larga y dura (aunque más espectacular) si tenéis los pies acostumbrados a las caminatas.

La ruta corta al interior del Croscat

Esta ruta comienza en el aparcamiento del volcán de Santa Margarida (en la carretera GI-524 de Olot a Santa Pau) que es el que está justo al lado del Croscat. Debes cruzar la carretera y seguir hasta el restaurante El Masnou. Desde ahí, a la izquierda, sigue un camino que va bordeando toda la ladera del Croscat y nos regalará las primeras vistas hasta llegar al centro de información de Can Passavent. Echad un vistazo a la exposición y la información sobre el volcán, y seguid desde ahí la ruta marcada al interior del Croscat, la explotación minera, y las espectaculares vistas. 

 

El paisaje marciano dentro del volcán. Imagen: Mikipons, CC BY-SA 3.0.

En total, la distancia es de 1,9 kilómetros, y entre adultos lleva unos 50 minutos. Para regresar, eso sí, hay que volver sobre los mismos pasos en dirección contraria.

Lo que hace que, si os veis con capacidad, valga la pena probar la ruta más larga.

La ruta larga al interior del Croscat

Si vas a pasar el día entre volcanes, lo mejor es verlos bien, y existe una ruta circular impresionante que te llevará por dos volcanes y un bosque mágico. La distancia total son unos 12 kilómetros, y en condiciones normales se hace en 4 h 20 min

Se puede empezar en el mismo aparcamiento que la anterior, pero se recomienda hacerlo por el Área de Can Serra, que es el aparcamiento de La Fageda d'En Jordà. Este hayedo es único en la península, crece a una altura anormal sobre la colada del Croscat, un paraje húmedo que ha inspirado poesías y que es uno de los pequeños paraísos que esconde Catalunya

Tras atravesar el hayedo, accidentado por la colada de lava pero relativamente llano, el camino sube hacia el Coll de Can Batlle y la iglesia románica de Sant Miquel Sacot, del siglo XI. Este camino te llevará al volcán de Santa Margarida, a cuyo cráter podrás descender para ver la curiosa ermita románica, también del siglo XI, levantado en el mismo centro. Sin miedo a nada.

El itinerario prosigue entonces hasta el volcán Croscat, con su increíble paisaje, y enlazas allí con la ruta breve explicada antes, hasta el antiguo vertedero de la mina, hoy sellado, que desciende suave hasta el aparcamiento de Can Serra donde comenzaste.

¿A que quieres sumar a tu lista de cosas hechas el caminar dentro de un volcán? Pero, ¿cuál de estas dos rutas te ves haciendo?