Este verano será mejor empezar a preparar el ventilador o el aire acondicionado para afrontar las altas temperaturas propias de la época. En un año 2023 en el que el calor se ha convertido en protagonista antes de tiempo, con una ola de calor que ha llegado en pleno mes de abril, toca empezar antes a acondicionar la casa.
El gran dilema sobre qué opción es mejor para este verano llega puntual a su cita. Si tienes dudas sobre qué necesita tu casa, deberás tener en cuenta algunas variables. La extensión de la casa o de la habitación, o el presupuesto son algunas de ellas, y las deberás equilibrar bien para encontrar la mejor opción para tu hogar este verano.
Las 5 grandes variables para elegir entre ventilador o aire acondicionado
El ventilador consume menos que el aire acondicionado
La OCU ha analizado el consumo medio de estos electrodomésticos. El aire acondicionado tiene un consumo medio de unos 27 euros mensuales, mientras que el gasto con un ventilador, para las mismas horas de funcionamiento, será de solo 5 euros.
Aunque no tengan las mismas prestaciones y la forma de enfriar el ambiente sea distinta, lo cierto es que el gasto que supone el aire acondicionado es un factor a tener en cuenta para muchas familias, y más con los costes eléctricos tan volátiles. En este sentido, el volumen y las características del espacio a climatizar también harán más adecuado uno u otro sistema, ventilador o aire acondicionado.
El ventilador es menos agresivo con el entorno
En términos de sostenibilidad no hay color, el ventilador es mejor, por lo explicado arriba: consume muchísima menos electricidad, y ello implica menores emisiones. Pero es que, además, el aire acondicionado enfría el interior expulsando el calor al exterior. Con un aparato, no ocurre nada. Con veinte, tampoco. Con veinte mil o cien mil aparatos vomitando calor al exterior en una ciudad en verano... pues ayuda poco a que se pueda ir por la calle.
El aire acondicionado tiene un coste de instalación mayor que el ventilador
Cuando compras un ventilador, llegas a casa y lo enchufas, tardas apenas unos segundos en tener este elemento imprescindible para el verano en marcha. La instalación del aire acondicionado, en cambio, supone la llegada de un especialista a nuestro hogar, quizá una pequeña obra (para pasar los cables o la salida de aguas) y una espera. El presupuesto de instalación o el tiempo invertido juegan un papel importante.
Ahora bien, la llegada de un aire acondicionado es para que dure años y como, además, la mayoría de modelos actuales tienen bomba de calor y la posibilidad de calentar también la casa, es importante que tengamos en cuenta el conjunto para determinar si nos sale a cuenta la inversión.
🥶 Esta es la temperatura ideal del aire acondicionado para ahorrar sin pasar calor
El ventilador crea la sensación de frescor, pero no enfría el aire
Los sistemas para generar sensación de frescor que emplean ambos dispositivos son distintos. Los ventiladores lo que hacen es mover el aire de la estancia. Eso puede refrescar mínimamente el ambiente y, en condiciones normales, es más que suficiente para soportar el calor si se aísla todo de forma adecuada (ventilar mañana y noche, bajar toldos y persianas en las horas fuertes de sol, etc.). Los de techo son especialmente efectivos.
El problema es que cuando el calor se pone realmente salvaje, como en las peores noches del verano de 2022, el aire que mueve el ventilador es demasiado caliente como para que sirva para nada el movimiento. En esto, el aire acondicionado gana de calle, porque lo que hace es enfriar primero, y luego enviar ese aire frío a ventilar la estancia.
Es decir, en efectividad contra el calor, el aire acondicionado es imbatible. Eso sí: los contrastes de temperatura que puede haber entre el interior y el exterior pueden causarte más de un resfriado, o darte un golpe de calor nada más salir de casa.
Dependiendo del tipo de calor es mejor aire acondicionado o ventilador
Las horas que pasas en casa y las temperaturas en tu zona son el factor más importante a la hora de elegir un sistema u otro. Si es una segunda vivienda y el calor no es muy acusado, con un ventilador quizás sea más que suficiente. Por el contrario, si llegas a más de 40º durante varios días seguidos y el calor se prolonga hasta el mes de octubre, ganarás con un aire acondicionado, invertirás en un elemento esencial para tu casa.
Por otro lado, el aire acondicionado seca el ambiente, lo cual puede ser bueno o malo. En principio, eliminar la humedad del ambiente ayuda a que el calor sea más soportable, por lo que el efecto es positivo. Sin embargo, suele resecar mucho la garganta, y no es el sistema más adecuado para dormir. De hecho, para las noches, lo óptimo es enfriar un poco con el aire acondicionado, y luego mover ese aire fresco con un ventilador.
En cualquier caso, ventilador o aire acondicionado, has de elegir el sistema que mejor se adapte a ti a partir de estos criterios de gasto, consumo, eficacia, bienestar y condiciones locales. Pero elige pronto, porque tras la tregua lluviosa de mayo, se acerca otro verano que pinta realmente caluroso.
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