Dibujar un árbol es el título del libro publicado por Editorial Comanegra (Barcelona, 2013), que recoge ocho trabajos del autor, acompañados de pensamientos sobre la creación artística, y del cual ahora el Museo de la Garrotxa, con el mismo título, despliega el contenido en formato expositivo. El tema nuclear de la muestra es el árbol, uno de los símbolos más universales y la expresión ancestral de antropoformisme, que admite todo tipo de metáforas existenciales tanto individuales como sociales. El árbol, en sí mismo, es todo un ecosistema y, en conjunto, formando un bosque, es uno de los ecosistemas más complejos de la naturaleza.
Tal como afirma Nogué, "en mi representación de los árboles he encontrado un ámbito propicio para establecer metáforas, metonimias y figuraciones sustitutorias de circunstancias y sentimientos humanos. La pintura de los árboles también ha sido, para mí, un campo de experimentación metodológica. Por ejemplo, cuándo el ritmo de trabajo me pedía calma, recurría todo desarrollando un dibujo figurativo que podía llegar a ser de gran formato y me ofrecía la ocasión de vivir largas jornadas en el silencio del estudio. Por otra parte, pocas situaciones son tan enigmáticas como la relación entre la ciudad y los árboles. La ciudad construye la historia y los árboles son testigos silentes. Nada de lo que sucede a su alrededor les es ajeno y su observación hace que esta investigación mía con los árboles solo esté empezada".
Ahora, es el turno de una visita guiada con el artista para no perderte ningún detalle de esta exhibición.

