El año 2024 será un año donde se decidirán muchas cosas. En este sentido, estará marcado por las urnas, pero también por las armas. Se celebrarán elecciones a más de 70 países –que actuarán como un test de estrés para el sistema democrático. Así lo han explicado al CIDOB a la presentación de El Món el 2024. En este sentido, desde el think tank destacan que se acentúa la erosión de las normas internacionales vigentes y aumenta la imprevisibilidad. Así, este 2024 empieza totalmente abierto, marcado por un mundo cada vez más diverso y (des)ordenado, definido por alianzas e intereses cambiantes en cuestiones como la competición geopolítica, las transiciones verde y digital o la seguridad internacional.

Urnas de la segunda vuelta|bóveda de las elecciones argentinas / Efe

Hay unas elecciones que podrían suponer un cambio geoestratégico importante. O dicho de otra manera: la posibilidad de Donald Trump vuelva a ser presidente de los EE.UU. Otro punto crucial son las elecciones de Taiwán, donde los electores tendrán que escoger si prefieren una política de cooperación o de hostilidad con China. Pero también habrá elecciones en la Unión Europea, Pakistán, Irán, Venezuela, Ucrania y Rusia.

Desde los EE.UU. hasta la UE pasando por Taiwán

Después de ver cómo salió Trump de la Casa Blanca, seguramente costaba imaginar que pudiera volver a presentarse como candidato. Las sorpresas, sin embargo, son intensas. Sea por la falta de liderazgo o de candidatos, cada vez hay más opciones para Trump. No todo el mundo apuesta por él, a pesar de todo, las posibilidades están sobre la mesa. No todo pasa por los EE.UU. Uno de los otros focos electorales importantes es Taiwán. Seguramente no serán, a ojos del lector, unas elecciones trascendentales, pero estos comicios tienen un trasfondo que marcarán un antes y un después en las relaciones con Pekín. Una victoria del Kuomintang, seguramente rebajaría la tensión de la zona, ya que es contrario los gestos rupturistas que ha habido hasta ahora. Si ganas el Partido Democrático Progresista (PDP) –que sería la tercera victoria consecutiva– implicaría continuar como hasta ahora, con una política más próxima a los EE.UU. y de más hostilidad con China. Hay un tercer partido en juego, que es el Partido Popular de Taiwán, que tendría también en el orden del día una política de cooperación con China.

El presidente de los EE.UU., Joe Biden / Efe

Por otra parte, para la Unión Europea también será un año importante. El mes de junio los europeos votarán a los miembros del Parlamento Europeo. El foco y las preguntas están puestas en hasta dónde podrá llegar la ola de la extrema derecha que ha empezado en diferentes países de la Unión y constatar qué panorama se dibuja a partir de eso en la UE y las dinámicas que comporta.

Putin y Zelenski, enfrentados también en las urnas

La guerra de Ucrania, que ha quedado en un segundo término después del estallido de la guerra entre Israel y Hamás, podría vivir un nuevo giro de guion este 2024. Rusia y Ucrania tienen previstas unas elecciones para el año 2024. Y los dos países las tenían previstas para el mes de marzo. La guerra y la ley marcial podrían hacer pensar que la convocatoria electoral en Ucrania no llegará en marzo. Algunas voces de los EE.UU., uno de los principales apoyos|soportes para el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, aseguran que haría falta que se celebraran, según destacaba El País. Por otra parte, se esperan elecciones a Rusia, pero con los mismos resultados que hay ahora. Con los principales líderes de la oposición fuera de combate y con la desaparición de Navalni, Vladímir Putin, actual presidente del país, repetirá como candidato y volverá a ganar.

El presidente ruso, Vladímir Putin / Efe

La India y el Pakistán también tienen una cita con las urnas. El primer ministro de la India, Narendra Modi, busca un tercer mandato después de hacer un trabajo geopolítico descomunal, manteniendo el pulso con China. El país ha crecido económicamente y también ha ganado posicionamiento en el mundo. El Pakistán, con una población de 231,4 millones, según el Banco Mundial, también tendrá trabajo electoral este año.

Lula recupera el Brasil

El retorno de Lula da Silva al Brasil ha comportado que el país vuelva a actuar como árbitro de la región, tal y como destacaba la investigadora principal de América Latina por el Cidob, Anna Ayuso. Las elecciones en la Argentina de este tramo final del 2023, traerán todas las consecuencias y recortes con Milei al frente. Por ahora, ya se han anunciado 300 medidas que pueden comportar una desestabilización y controversia al país. Después de esta sacudida final, el 2024 se presenta más 'tranquilo' en este sentido. México y El Salvador celebrarán elecciones, pero no se esperan cambios. Venezuela también tendría que celebrar elecciones, aunque no se sabe exactamente qué pasará. Eso sí, se cree que no serán del todo transparentes. Hay que tener en cuenta, también, la última maniobra de Nicolás Maduro, presidente del país, con el referéndum sobre la anexión de una parte de la Guyana.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro / Efe

 

 

 

Imagen principal: una mujer iraquí vota durante las elecciones provinciales, en un colegio electoral del distrito de Karada, Bagdad, Iraq, el pasado 18 de diciembre / Efe