Este jueves se celebra el aniversario de un momento crucial en la Segunda Guerra Mundial. Hace exactamente 80 años que las tropas aliadas desembarcaban en la Normandía ocupada por la Alemania nazi e iniciaban la esperada contraofensiva en el frente oeste que permitiría acabar ganando el conflicto bélico más sanguinario del siglo XX. La operación militar tuvo el 6 de junio de 1944 como jornada más importante: en el 'Día D', cerca de 160.000 soldados atravesaron el canal de la Mancha, desde Inglaterra, para recalar en Francia y posteriormente en toda Europa. Un acontecimiento que no ha sido omitido por las autoridades, que se han encontrado en el lugar de los hechos en una espectacular ceremonia.
Y es que la plana mayor de medio mundo ha estado presente en la costa de Normandía para recordar aquel momento, partícipes en varios actos que se han celebrado en las playas donde tuvo lugar el desembarque. Han estado los representantes políticos de los Estados protagonistas: el presidente Emmanuel Macron en representación de Francia, país que a pesar de estar bajo ocupación nazi recibió la llegada de las tropas, y también las máximas autoridades del Reino Unido, Rishi Sunak, Estados Unidos, Joe Biden, y Canadá, Justin Trudeau, ya que la operación anfibia estuvo conformada principalmente por soldados de los tres países. En sus discursos, han prometido "nunca olvidar" el sacrificio de las tropas para "liberar Europa", mientras que también han reclamado a las naciones del mundo actual ser "dignos de su sacrificio".
Ha habido otras presencias destacables. Entre los 25 jefes de Estado invitados a las ceremonias, ha destacado el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, que ha recibido un sonoro aplauso, y también el canciller Olaf Scholz, a pesar del papel de la Alemania nazi en la guerra. Pero también ha habido una ausencia destacada, la nada habitual de Rusia, que no ha sido invitada por primera vez en respuesta a la guerra de Vladímir Putin con Ucrania.
Entre los presentes, tampoco ha habido ninguna autoridad española. Los organizadores se han olvidado de una España que siempre se ha encontrado en un punto de equilibrio en estas ceremonias: el régimen franquista se mantuvo en una postura oficial de no beligerancia. Ahora bien, es imposible olvidar por una parte la participación activa de la División Azul dentro del ejército nazi, y por otra el rol de centenares de exiliados republicanos que sí lucharon del lado de los aliados. Ejemplo de ello es la Spanish Company Number One, una unidad de voluntarios españoles que sirvió en el ejército británico durante la Segunda Guerra Mundial, y que —a pesar de no desembarcar en el 'Día D' — sí que participó en las operaciones militares de la batalla de Normandía. Sus sacrificios, sin embargo, no fueron suficientes para ganarse este miércoles un lugar entre las autoridades llamadas a rememorar aquellos acontecimientos.
El Brexit hace acto de presencia
Más allá de los parlamentos de los líderes mundiales, el protagonismo ha sido para los veteranos de la guerra, la mayoría de los cuales ya rondan los 100 años, y que han visto cómo se les dedicaba un emotivo tributo de agradecimiento. La avanzada edad ha provocado malas noticias, cuando el veterano estadounidense Robert Persichitti ha muerto mientras se desplazaba en barco a Normandía para participar en la ceremonia. En la otra cara de la moneda, Emmanuel Macron ha condecorado a la veterana británica Christian Lamb con la insignia de 'Caballero de la legión de honor' del ejército francés por haber ayudado a diseñar el desembarque del 'Día D'.
Las tropas activas actualmente también han tenido un rol destacado, participando en las ceremonias, con formaciones militares y muestras de aviones y vehículos de combate. El momento más viral, sin embargo, llegó ayer, en un acto de recuerdo en el que intervinieron paracaidistas británicos. En cuanto aterrizaron en suelo francés, se vieron obligados a pasar el control fronterizo de aduanas. Y es que el Brexit no descansa, ni siquiera en el 80 aniversario del desembarque de Normandía.