Un grupo de colonos judíos instalaron la noche del domingo una acampada ante de la Franja de Gaza para "demostrar que podemos recuperar Gaza" y expulsar a sus habitantes. Liderados por el grupo radical Nachala, capitaneados por la colona Daniella Weiss, —movimiento de colonos que impone puestos de avance en territorio palestino— los colonos han instalado una hilera de carpas y tiendas de campaña situadas en línea recta en el corrector Netzarim —verja impulsada por el Ejército de Israel que divide la Franja por la mitad— y reclaman que volver al enclave porque aseguran que es su tierra y "les pertenece". "Hemos venido aquí para decirle en el mundo que necesitamos estar en Gaza y quedarnos allí para siempre. Nos pertenece y volveremos a vivir allí. Es la única manera de acabar con Hamás", explica a EFE Yair Maoz, un colono que vive en un asentamiento en Hebrón, en la Cisjordania ocupada, junto a su mujer y sus cinco hijos. Los ministros ultranacionalistas de Seguridad Nacional y Finanzas, Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich, respectivamente, que también son colonos, visitaron la acampada este lunes. Los asistentes al acto a favor de la ocupación judía de la Franja cuentan con la protección del ejército y la policía.
Creación de seis colonias en Gaza
"Lo diré muy claro y alto: los palestinos han perdido su derecho a estar en Gaza después de lo que nos hicieron el pasado 7 de octubre. Ninguno de ellos permanecerá en la Franja, estamos preparados para volver lo antes posible", ha reivindica Weiss ante un público que aplaude cada una de sus palabras. Weiss, que fue alcaldesa del asentamiento de Kedumim, defiende el retorno de los israelíes en Gaza argumentando que beneficiará a los Estados Unidos y a Europa, ya que según ella supondrá el fin "del demonio de Hamás en la Franja de Gaza". Y ha añadido que "estoy deseando que todos vosotros podáis disfrutar muy pronto de las playas de Gaza". Weiss ha sido arrestada en varias ocasiones para agredir a la Policía israelí en actos de protesta.
Israel desmanteló 21 asentamientos dentro de la Franja de Gaza en el 2005, la mayoría en primera línea de playa, y obligó a unos 8.000 residentes a marcharse después del plan unilateral de retirada del entonces primer ministro, Ariel Sharon, que acabó con una ocupación directo desde la guerra de los Seis Días de 1967. Ahora, el proyecto que impulsa el grupo de Weiss es la creación de seis asentamientos en diferentes puntos a o largo de toda la Franja de Gaza, hoy con más de dos millones de palestinos, la mayoría desplazados después de más de un año de guerra. El pasado mes de enero, en una conferencia celebrada en Jerusalén en la cual participaron hasta doce ministros israelíes, los colonos expusieron públicamente sus dos grandes objetivos.
Por su parte, el ministro de Seguridad Nacional de Israel, el ultranacionalista Itamar Ben Gvir, ha dado apoyo a la iniciativa y ha planteado la posibilidad de impulsar nuevos asentamientos en el interior de la Franja de Gaza, un hecho que no sucede desde 2005, y ha señalado que "fomentar la emigración" de la población palestina fuera del enclave es la solución "más ética" al conflicto. "Si queremos, podemos renovar los asentamientos en Gaza", ha asegurado. "Sin asentamientos no hay seguridad. Nos asentaremos y haremos que Gaza prospere porque es nuestra tierra", ha reivindicado.