Los 27 estados de la Unión Europea han llegado a un acuerdo este miércoles para favorecer el uso de los fondos europeos de cohesión a la recuperación de zonas afectadas por fenómenos climáticos extremos. La medida, si llega a la mayoría en el Parlamento Europeo, servirá para hacer frente a las consecuencias sufridas en áreas como la de los pueblos próximos a la ciudad de València, que fueron afectados por la DANA hace casi un mes. La propuesta, anunciada por la Comisión Europea este septiembre, se centra en enmendar la regulación sobre los Fondos Europeos de Desarrollo Rural, el Fondo de Cohesión y el Fondo Social Europeo +, así como el Fondo Europeo para el Desarrollo Rural.

El acuerdo llega en el día de confirmación de la nueva composición de la Comisión Europea, después de que el Parlamento Europeo haya aceptado a todos sus miembros. A través de esta reforma, los estados miembros afectados por desastres naturales, como España por la DANA, podrían utilizar los fondos para reparar infraestructura dañada y proveer de alimentos, materiales básicos y soporte médico a los damnificados a partir del 1 de enero del 2024. El consenso se ha dado después de una negociación en que los embajadores de los 27 han propuesto algunos cambios a la Comisión sobre su planteamiento inicial. El ejecutivo europeo compartía objetivos con el Consejo de la Unión Europea, pero se tenían que matizar algunas propuestas a las cuales, finalmente, se les ha dado el visto bueno.

Una de las propuestas más destacadas es la demanda del Consejo que los estados miembros aporten un 5% de la cantidad recibida en concepto de financiación y que el otro 95% restante provenga de fondos comunitarios. En el texto inicial, la Comisión sugería que las aportaciones provendrían únicamente de fondos comunitarios. Bruselas también planteaba una prefinanciación del 30% de las ayudas solicitadas, una cifra que el Consejo ha rebajado al 25%. Al mismo tiempo, los embajadores han propuesto que las medidas se puedan aplicar a desastres naturales que sucedan hasta el 31 de diciembre de 2025, una fecha que la Comisión Europea no había fijado.

Una reacción a fenómenos como el temporal Boris

La propuesta fue anunciada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, a causa de las inundaciones que golpearon el centro y el este del continente europeo por el temporal Boris. De la misma manera, los incendios que sufrió Portugal este mes de septiembre también fueron un factor determinante en la proposición de esta medida. El objetivo principal de los estados miembros es garantizar que los fondos se puedan movilizar "de manera rápida y flexible para ayudar en los esfuerzos de recuperación y reconstrucción después de un desastre", según destaca el Consejo. La siguiente fase, una vez ha llegado el acuerdo entre la Comisión y los embajadores, será que los negociadores del Parlamento Europeo adopten su postura para que las conversaciones para sacar adelante la propuesta se inicien "en las próximas semanas".