El choque entre un avión comercial y un helicóptero en Washington se ha convertido en el peor desastre aéreo de los Estados Unidos (EE.UU.) en los últimos años. Mientras todavía se están buscando los cuerpos de la sesentena de personas que han muerto, la nueva Administración de Donald Trump está utilizando el accidente para atacar a sus rivales políticos. El republicano ha culpado las políticas de fomento de la diversidad de los gobiernos demócratas del accidente. Sin embargo, hay políticas actuales de Trump que están dificultando la gestión de esta crisis, como por ejemplo su purga de cargos y la reducción del número de trabajadores. La Administración Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés) se enfrenta a su primer gran desastre aéreo en 16 años sin ningún líder porque Elon Musk empujó para expulsarlo, según informa The Verge.

Elon Musk ha prometido echar a miles de trabajadores del gobierno federal, siguiendo el estilo que ha ostentado en X (antes Twitter). En el camino de reducir y debilitar el Estado, Musk no deja escapar la oportunidad de apartar a quien le pueda molestar sus intereses empresariales. Es el caso de Michael Whitaker, el exdirector de la FAA, agencia que regula una de las empresas del sudafricano: SpaceX.

De hecho, Musk pidió públicamente que Whitaker dimitiera y ha criticado la agencia en varias ocasiones. En una publicación en su red social afirmó que la FAA "estaba asediando SpaceX por tonterías que no afectaban a la seguridad mientras daba una carta blanca a Boeing, incluso después de que la NASA concluyera que su nave espacial no era lo bastante segura para devolver a los astronautas". También afirmó que los humanos no llegarían a Marte, uno de sus grandes objetivos, si no había "reforma radical en la FAA". Delante de esta presión, los 20 de enero, cuando Trump tomó posesión, Whitaker renunció a su cargo.

Una agencia sin líder en plena crisis

El hecho de que la FAA no tenga líder justo cuando acaba de suceder el peor accidente en casi 20 años no ha pasado desapercibido. En una rueda de prensa el pasado jueves con los servicios de emergencia y el secretario de Transporte nombrado por Trump, Sean Duffy, ignoró las preguntas de los periodistas sobre si la FAA tenía un director en funciones para ayudar a gestionar la crisis.

REPORTER: Is there an acting FAA director? DUFFY: *walks away* (The FAA director resigned on the day of Trump's inauguration under pressure from Elon Musk)

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— Aaron Rupar (@atrupar.com) 30 de enero del 2025, a las 15:16

Trump afirmó el jueves que había escogido Chris Rocheleau, un alto ejecutivo de una asociación empresarial de aviación, como nuevo ninguno de la FAA, pero no ha proporcionado más detalles.