Al menos cinco mujeres han denunciado que fueron drogadas con sustancias de sumisión, la conocida como la "droga del violador" durante la fiesta de verano del Partido Socialdemócrata alemán (SPD), un acto en el cual estaba el canciller alemán Olaf Scholz. La Policía de Berlín está investigando las denuncias, y hasta ahora, ha identificado hasta cinco víctimas, todas ellas asistieron a la fiesta de la SPD este miércoles por la tarde en la cual asistieron cerca de un millar de personas, entre diputados, empleados del Bundestag alemán y de las circunscripciones electorales del Partido Socialdemócrata. El escándalo lo ha sacado a la luz el diario alemán Der Tagesspiegel.
La primera a dar la voz de alarma fue una joven de 21 años que asegura que se empezó a encontrar mareada y a tener pérdidas de memoria después de asistir a esta fiesta, la mujer afirma que no había bebido alcohol durante todo el acontecimiento. Según lo que ha detallado a la policía a partir de las 21:30 horas de la noche se empezó a marear y al día siguiente no recordaba nada de lo que había pasado durante la noche. Fue a un hospital donde pidió que le hicieran un análisis de sangre y un examen toxicológico. Los resultados de las pruebas todavía no están disponibles. Este mismo sábado la policía ha tenido conocimiento de cuatro casos más con síntomas similares.
El SPD condena el incidente
La Policía todavía no ha identificado a ningún sospechoso, pero el partido socialdemócrata ya ha salido al paso y ha denunciado los hechos ante la policía. El SPD ha enviado un comunicado a todas las personas que asistieron a la fiesta para ponerlos en conocimiento de lo que ha pasado, hecho que han tildado "de acto monstruoso". Un portavoz del grupo parlamentario ha indicado que no tenía conocimiento que las mujeres afectadas hubieran sido víctimas de otros delitos como robo. Por otra parte, la líder del grupo parlamentario socialdemócrata, Katja Mast, ha escrito en su cuenta de Twitter que "el partido está consternado" por esta situación y asegura que harán "todo lo posible para aclarar los hechos". El grupo parlamentario del SPD recomienda que las otras personas afectadas "denuncien inmediatamente a la policía".
La policía berlinesa advierte repetidamente del peligro que provoca que este tipo de delincuentes mezclen estas sustancias en bebidas en fiestas o clubs y roben o agredan sexualmente a las víctimas. Las investigaciones acostumbran a complicarse porque las víctimas no suelen recordar los hechos.