El Parlamento alemán ha aprobado este miércoles por un estrecho margen de votos una moción presentada por la Unión Demócrata Cristiana (CDU) que insta en el gobierno alemán a imponer duras restricciones a la inmigración, y que ha resultado especialmente controvertida por contar con el apoyo de la ultraderecha de Alternativa por Alemania (AfD), un hecho que empieza a romper el cordón sanitario a la extrema derecha que imperaba en la política germánica.

La resolución, que se ha aprobado con 348 votos a favor y 345 en contra, no tiene fuerza de ley, pero pide al ejecutivo alemán que ponga en marcha controles fronterizos permanentes y que "rechace todos los intentos de entrar ilegalmente en el país sin excepción". El texto dice que eso tiene que incluir a los que buscan protección y asilo, porque en los países vecinos de cuya UE llegan "ya están a resguardo de la persecución".

La resolución, que tilda de "claramente disfuncional" la normativa europea vigente sobre inmigrantes y solicitantes de asilo, también sostiene que las personas a las cuales se exige que abandonen Alemania "tienen que ser detenidas inmediatamente", y que tendrían que construirse más centros de detención, haciendo uso incluso en cuarteles vacíos del ejército.

La moción no se ahorraba a las críticas a los ultras de la AfD, a quien acusa "de utilizar los problemas, preocupaciones y temores causados por la inmigración ilegal masiva para atizar la xenofobia y difundir teorías conspirativas". A pesar de esta cláusula, la AfD ha votado a favor de la resolución, junto con los liberales del Partido Democrático Libre (FDP), contribuyendo a su aprobación, haciendo insuficiente la fuerte oposición de los socialdemócratas del canciller Olaf Scholz y de los Verdes.

Más controles fronterizos y rechazo a los demandados de asilo

Antes de la votación, el líder de los conservadores alemanes, Friedrich Merz, ha justificado su propuesta con el argumento que otros países también han endurecido sus políticas migratorias, mencionando a los nórdicos, Italia y los Países Bajos."Dado que toda la política europea de inmigración y asilo se ha vuelto disfuncional, esta propuesta es una que ya está permitida por la simple legislación europea. ¿Qué están haciendo Dinamarca, Suecia, Finlandia, Italia, los Países Bajos y muchos otros países de la Unión Europea de forma diferente de lo que estoy proponiendo aquí"?, ha dicho Merz durante el debate en el Bundestag.

Los conservadores, ahora a la oposición, han anunciado que más allá de la moción presentarán un proyecto de ley, que se someterá a votación en segunda y tercera lectura el viernes, para endurecer la política migratoria de Alemania. "La propuesta más importante ahora es aplicar por fin controles fronterizos permanentes y permitir el rechazo a los demandantes de asilo en la frontera", ha recalcado Merz, y ha defendido que Alemania tiene el derecho de recurrir al artículo 72 del Tratado de Funcionamiento de la Unión, que habla sobre las responsabilidades de los Estados miembros en cuanto al mantenimiento del orden público y la salvaguardia de la seguridad interior.

Merz ha señalado que sobre este tema "hay que tomar ya decisiones eficaces contra la afluencia de refugiados ilegales a Alemania y contra la residencia ilegal", y ha recordado el reciente ataque de un saudí contra un mercado ambulante de Navidad a Magdeburg, en el cual murieron seis personas, y el apuñalamiento perpetrado por un solicitante de asilo afgano a un niño y un adulto en Aschaffenburg. ¿"Qué más tiene que pasar en Alemania? ¿Cuántas personas más tienen que ser asesinadas, cuántos niños más tienen que ser víctimas de tales actos de violencia antes de que también se den cuenta de que eso es una amenaza para la seguridad y el orden públicos"?, se ha preguntado Merz ante el resto de diputados.

Merz justifica romper el cordón sanitario a la AfD

El líder de la oposición conservadora ha defendido que su partido necesitará sumar apoyos más allá de la extrema derecha de Alternativa para Alemania para salir adelante en la votación del viernes, en un proyecto de ley, que entre otros, pretende acabar con la reagrupación familiar para aquellos que no tienen permiso permanente de residencia en Alemania y ampliar las competencias de la Policía Federal para que pueda rescindir ella misma permisos de residencia.

Merz ha defendido el apoyo de AfD a la moción de este miércoles, que empieza a rasgar el pacto del resto de partidos de no aprobar leyes con el apoyo de la ultraderecha, justificando que "ante la disyuntiva de seguir observando impotentes cómo la gente en nuestro país es amenazada, herida y asesinada o hacer lo que es irrefutablemente necesario en la materia, decidimos estar a favor del segundo". La CDU empieza así a abrir camino por un pacto con la AfD después de las próximas elecciones para recuperar la cancillería, porque aunque los conservadores continúan como favoritos a los comicios de este febrero, todo indica que no cuentan con los apoyos necesarios para gobernar en solitario.