Las cosas han cambiado en las posiciones de Alemania con respecto al petróleo ruso. Este lunes por la mañana, el gobierno alemán ha evidenciado su cambio de rumbo y ha mostrado su total apoyo a un embargo del petróleo ruso para seguir presionando el gobierno de Vladímir Putin después de la invasión de Ucrania del pasado 24 de febrero. Concretamente, ha sido la ministra de Exteriores, Annalena Baerbock, quien ha evidenciado esta posición en una entrevista en la televisión alemana ARD asegurando que Berlín está "preparado" para hacer frente a no tener petróleo ruso durante varios años.
En esta línea, la ministra ha explicado que los nuevos contratos firmados por Alemania sobre el suministro de petróleo han reducido de manera significativa la dependencia de Rusia. De hecho, Baerbock ha asegurado que el consumo de petróleo ruso ha pasado del 35% al 12% en cuestión de pocas semanas. A pesar del cambio de posición de Alemania, el ministro de Economía del país, Robert Habeck, ha avisado de que de momento no comportará nada porque todavía no hay un acuerdo sobre este asunto en el seno de la Unión Europea a causa de que "otros países no están todavía preparados" para poder dejar de depender de Rusia en materia energética.
Sobre las consecuencias de embargar el petróleo en Rusia, Habeck ha reconocido, efectivamente habría un impacto sobre Alemania que se traduciría en subidas de precios, al mismo tiempo que podría implicar déficits temporales de petróleo, aunque en ningún caso implicaría que Alemania cayera en una "crisis petrolera".
Reunión en Bruselas
Ante la complicada situación energética que vive Europa, este lunes habrá una importante reunión en Bruselas. Se reunirán todos los ministros de Energía de la Unión Europea para abordar la situación energética en el mercado comunitario después de que la compañía de gas estatal rusa, Gazprom, decidiera cortar el suministro a Polonia y Bulgaria la semana pasada ante la negativa de los dos países de pagar el gas en rublos. En este contexto, el ministro de Exteriores de Ucrania, Dimitro Kuleba, pidió el domingo al Alto Representante de la UE para Política Exterior y Seguridad Común, Josep Borrell, que el próximo paquete de sanciones contra Rusia incluya un embargo del petróleo.
Ahora bien, la reunión, a no ser que haya una sorpresa mayúscula, la UE no podrá tomar ninguna decisión al respecto, ya que el gobierno húngaro ya ha anunciado hoy que mantendrá su oposición a que la UE embargue las importaciones de petróleo y gas ruso. "Hungría no ha retirado su veto. De hecho, la postura de Hungría sobre las sanciones en el petróleo y el gas ruso sigue igual: no las secundemos", ha asegurado vía Twitter, Zoltán Kóvacs, secretario de Estado de Comunicaciones Internacionales húngaro. Con este tweet, Kóvacs ha negado así una información publicada por la radio alemana ZDF que indicaba que países como Austria, Hungría y Eslovaquia estaban dispuestos a retirar su veto al embargo del petróleo ruso.
Hace falta recordar que Hungría compra en Rusia el 85% del gas y el 65% del petróleo que consume, y en esta línea, el ministro húngaro de Gobernación, Gergely Gulyás, ya pidió este domingo en la UE que no apruebe sanciones que afecten al gas y al petróleo rusos, ya que, en caso de hacerlo, Hungría solo tendría acceso a estas fuentes de energía a precios muy elevados.