Alemania ha reanudado este viernes las deportaciones de delincuentes afganos en su país, una medida que no aplicaba desde que los talibanes tomaron el poder, en agosto del 2021. El gobierno alemán pone en marcha la promesa que el canciller Olaf Scholz de reanudar las deportaciones después del asesinato de un policía en Mannheim el pasado junio, y unos días después del atentado en Solingen en que murieron tres personas, hecho que ha llevado al ejecutivo anunciar un duro paquete de medidas. En total se han deportado 28 criminales contra los cuales se habían dictado órdenes de expulsión y no tenían derecho a permanecer en Alemania, según ha informado la ministra del Interior, Nancy Faeser. Todos los deportados este viernes son hombres, mayoritariamente de entre 20 y 30 años, que o bien estaban encarcelados, o bien en libertad, pero que habían sido condenados por diferentes delitos. Según informa el diario Die Welt, algunos de los delitos que habían cometido los deportados incluían violación y abusos sexuales, en algunos casos a menores, intento de homicidio, robo, lesiones corporales graves y fraude, entre otros. Uno de los deportados era un delincuente reincidente, que había cometido más de 160 delitos.
Ha sido el portavoz del gobierno, Steffen Hebestreit, el que ha anunciado estas deportaciones a través de un comunicado. "El interés de Alemania por la seguridad prevalece claramente sobre el interés por proteger delincuentes y personas peligrosas", ha afirmado. Hebestreit ha reconocido posteriormente en una rueda de prensa que, además de responsables de los estados federados, se han implicado en la organización de este vuelo países con los cuales Alemania tiene relación en Oriente Medio, ya que con Afganistán no tiene relaciones diplomáticas. "Tenemos que mirar por el interés de la protección de Alemania, y por eso se han buscado y encontrado caminos", ha dicho, aunque sin dar más detalles. Tan solo ha aludido al "trabajo clave" que ha hecho la oficina de representación alemana en Doha, en Qatar. La titular de Interior también se ha mostrado agradecida a las autoridades policiales y políticas competentes por "su estrecha colaboración". "Nuestra seguridad importa, nuestro Estado de derecho actúa", ha reivindicado.
Aunque las deportaciones se hayan producido pocos días después del atentado en Solingen, la realidad es que llevaban al menos dos meses preparándolas. Fue después de que un afgano de 25 años asesinara a un policía en Mannheim que Scholz anunció la reanudación de las deportaciones. El canciller, que está inmerso en la campaña electoral de las elecciones en Sajonia y Turingia de este domingo, ha explicado en un acto que la operación se ha preparado con discreción para garantizar el éxito, y ha apuntado que también se envía un mensaje a cualquier posible criminal que se arriesga a ser deportado si comete un delito.