La canciller alemana, Angela Merkel, se ha hartado de los alemanes que no se quieren vacunar contra la covid, y ha decidido penalizarlos a partir de ahora. En consenso con los länder, el gobierno alemán dejará de pagar a partir del 11 de octubre los tests de coronavirus a las personas no vacunadas, cuando hasta el momento eran gratuitos. La única excepción serán los menores de 18 años y las personas con contraindicaciones médicas.

El objetivo de la medida es promover la vacunación también por vías económicas, dado que una parte de la población sigue refractaria al pinchazo, en parte por las teorías de la conspiración. Con eso el gobierno alemán intenta evitar la vacunación obligatoria, que tiene problemas de constitucionalidad.

Una segunda medida para forzar la vacunación es ampliar la obligatoriedad de presentar un test de antígenos o un PCR negativo para participar en determinados espacios de la vida pública a partir del próximo 23 de agosto, cuando la incidencia acumulada por cada 100.000 habitantes en el plazo de una semana supere las 35 nuevas infecciones. Los ciudadanos completamente inmunizados con las dos vacunas o que puedan demostrar una recuperación de la enfermedad estarán exentos de esta obligación.

"A partir de ahora, empezaremos a tratar de forma diferente a los vacunados de los no vacunados. A partir de ahora, los que se han vacunado no necesitarán hacerse tests de coronavirus, y se tratarán de forma diferente a los no vacunados si la incidencia sigue aumentando. No podemos dejar que nuestro sistema sanitario se colapse. No nos lo podemos permitir. Pensar que podemos intentar conseguir la inmunidad de grupo y exponer a todas las personas a la infección sólo por no tener restricciones es algo que no haremos", ha indicado.

"Vacuna, vacuna, vacuna," resume Die Welt

En Alemania el número de personas con las dos vacunas llega justo al 55%, y queda lejos del objetivo del 70% en que se había marcado el Gobierno federal para finales de verano.

El gobierno alemán ha estado muy activo contra la covid, como cuándo difundió a finales del 2020 un anuncio, que desprendía ironía y hacía un homenaje "al héroe del sofá". En el vídeo aparecía un veterano que recordaba con gran solemnidad como el invierno del 2020 hizo la gesta de quedarse en casa, y no hacer nada de nada. El tono era surrealista.

 

El vídeo acababa con un impactante mensaje del gobierno alemán, después de que el espectador hubiera podido ver las explicaciones del veterano: "Sé un héroe y quédate en casa", proclamaba en la época del confinamiento.