El peregrinaje anual a la Meca, el hach, ha finalizado el pasado miércoles marcado por altas temperaturas que han superado los 50 °C. Este año el peregrinaje ha sido marcado por las muertes causadas por estas altas temperaturas. Anteriormente, se había cifrado en 550 a las víctimas del calor, pero como ya advertían las autoridades saudíes, la cifra se ha disparado hasta los 1.081 muertos.
El hach, cuyo momento es determinado por el calendario islámico lunar, ha vuelto a caer este año durante el verano saudí, que ya es normalmente caluroso. Sin embargo, estas temperaturas no se explican solo por la naturaleza desértica del lugar, sino que se agrava por la crisis climática. Según un estudio saudí publicado el mes pasado, el peregrinaje cada vez se verá más afectado por el calentamiento global, ya que se calcula que las temperaturas en la zona donde se realizan los rituales aumentaban 0,4 °C cada década. Es decir, temperaturas de más de 50 °C, como las vividas este año, se pueden convertir en un hecho recurrente.
Casi 52 °C
Las temperaturas alcanzaron el lunes los 51,8 °C en la Gran Mezquita de la Meca, según los servicios meteorológicos saudíes. Las altísimas temperaturas no han cogido por sorpresa ni a las autoridades saudíes ni a los mismos peregrinos, que ya estaban alertados. Sin embargo, a pesar de las medidas de prevención, los ritos multitudinarios implican estar al aire libre durante horas durante el día y cierto esfuerzo físico.
Unos 10 países han reportado 1.081 muertos durante el peregrinaje, uno de los cinco pilares del Islam que todos los musulmanes con los medios suficientes deben completar al menos una vez en la vida. El número de muertos es tan elevado que los países de las víctimas y Arabia Saudí colaboran para confirmar el número final de víctimas, de manera que todavía no se puede descartar que esta cifra aumente. Hasta ahora, los países que más muertos han reportado son Indonesia, Egipto y el Pakistán. También han confirmado muertes Malaya, India, Jordania, Irán, Senegal, Túnez, Sudán y la región autónoma del Kurdistán iraquí.
Actualmente, las temperaturas han bajado después de unas ligeras lluvias que cayeron el miércoles y ayudaron a bajar el termómetro. Sin embargo, todavía hay temperaturas de riesgo, pero lejos de las abrasadoras que las han precedido, y suponen un pequeño respiro a los millares de peregrinos que todavía tienen que abandonar el país. Según las autoridades del Arabia Saudita, unos 1,8 millones de peregrinos han participado este año en el hach, 1,6 millones de los cuales procedentes del extranjero, según las autoridades saudíes.