El actual presidente de Siria, Bashar al-Asad, ha ganado las elecciones presidenciales celebradas el miércoles con un 95,1 por ciento de los votos, según ha anunciado el presidente de la Asamblea Popular, Hamudeh Sabbagh, y ha informado la agencia oficial de noticias SANA. A pesar de la supuesta contundencia de la victoria 'a la búlgara', la comunidad internacional no está dispuesta a reconocer el resultado de las elecciones, donde sólo se le ha podido presentar a dos candidatos más, de partidos opositores tolerados, y mientras Siria sigue desangrándose por una guerra civil que ya va más de diez años que dura.

Según los resultados adelantados por Sabbagh, "el candidato Bashar al-Asad ha conseguido 13.540.860 votos" de los 18.107.109 que se han emitido tanto dentro como fuera del país, lo cual supondría una participación del 78,64 por ciento. Los otros dos candidatos a la presidencia eran Abdulá Salum Abdulá, del Partido Socialista Unionista (SUP) y Mahmud Ahmad Marai, de la Unió Democrática Árabe Socialista (DASU), partidos opositores autorizados por Damasco. Los resultados de estos dos candidatos no se han hecho oficiales todavía. Con todo, Marai habría obtenido el 3,3 por ciento de los sufragios, mientras que Abdulá conseguido el 1,5 por ciento de los votos.

Celebración de la victoria de Bashar al-Asad en Damasco / Efe

La misma agencia SANA, según recoge Europa Press, ha indicado que en las principales ciudades sirias, como Damasco, Homs y Alepo, los ciudadanos han salido a la calle a celebrar la reelección de al-Asad.

Sin reconocimiento internacional

Con este triunfo, que gran parte de la comunidad internacional ya anunció que no reconocería, Bashar al-Asad se mantiene como presidente de Siria, cargo que ocupa desde el año 2000, cuando sucedió a su padre, Hafez al-Asad. Además, Bashar habría incluso superado los votos obtenidos en el 2014, cuando consiguió un 88%.

Este mismo jueves, la Unión Europea (UE) ya ha anunciado que prolongará un año más sus sanciones contra Siria. Para la UE, estos comicios "no cumplen ninguno de los criterios de una votación verdaderamente democrática" y por lo tanto, "no contribuyen a solucionar el conflicto" en Siria.

Los veintisiete han matizado que la colaboración y la ayuda humanitaria queda exenta de las restricciones europeas. En el contexto del coronavirus, lo han recalcado de forma constante: las sanciones no afectan a la entrega de alimentos, medicamentos y equipos médicos.

A pesar del gran rechazo a este proceso electoral de la mayor parte de la comunidad internacional, algunos países como Venezuela han felicitado en al-Asad por su victoria. En este sentido, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ha dado la enhorabuena al pueblo sirio por la "ejemplar jornada democrática", que se ha traducido "en el amplio e inobjetable triunfo" de al-Assad.

 

Imagen principal: Bashar al-Asad con dos simpatizantes el día de las elecciones / Efe