El presidente estadounidense, Joe Biden, ha anunciado este martes que Estados Unidos, Alemania, Países Bajos, Rumanía e Italia proporcionarán a Ucrania cinco sistemas de defensa aérea, incluidos cuatro Patriot, en los próximos meses, respondiendo así a una de las principales peticiones de Kyiv. "Hoy anuncio una histórica donación", ha comenzado Biden, marcando expectación durante un acto en Washington para conmemorar los 75 años de la Alianza Atlántica. En concreto, EE.UU., Alemania y Rumanía se han comprometido a enviar baterías Patriot adicionales a Ucrania, mientras que Países Bajos y otros socios donarán componentes Patriot para permitir la operación de una batería antiaérea de ese tipo e Italia contribuirá con un sistema SAMP-T, según han detallado estos países posteriormente en un comunicado conjunto.

Ucrania ha pedido repetidamente a sus socios que proporcionen más ayuda con la defensa aérea, mientras se enfrenta a ataques de Rusia contra sus infraestructuras. Solo el lunes, Rusia atacó con misiles el principal hospital infantil de Kyiv y otras ciudades de Ucrania, matando al menos a 41 civiles, en la ola de ataques aéreos más mortífera en meses.

Biden ha prometido en la cumbre de la OTAN que Kyiv tiene el "completo apoyo" de la Alianza y ha acusado al presidente ruso, Vladímir Putin, de querer "nada menos que la total subyugación de Ucrania". "Putin quiere acabar con la democracia de Ucrania, con la cultura de Ucrania y borrar Ucrania del mapa, y sabemos que Putin no se detendrá en Ucrania. Pero, no se equivoquen: ¡Ucrania puede y detendrá a Putin!", ha clamado.

Biden ha aprovechado su discurso para reflexionar sobre el papel de la OTAN en su 75 aniversario y ha valorado que la Alianza está ahora en su mejor momento, tras la adhesión de Suecia y Finlandia y el aumento de gasto en defensa, de manera que la OTAN estima que 23 países superarán o alcanzarán este año el objetivo de destinar el 2% de su PIB a defensa. "Hoy, la OTAN es más poderosa que nunca, con la fuerza de 32 naciones", ha afirmado Biden.

La ceremonia para conmemorar el 75 aniversario de la fundación de la OTAN ha sido en el Auditorio Andrew W. Mellon, un lugar de importancia histórica por ser el sitio donde se firmó en 1949 el Tratado del Atlántico Norte, que estableció la Alianza. Uno de los momentos más importantes del evento fue la foto de familia del secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, con los jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza. Al abandonar el escenario, se pudieron observar interacciones entre los líderes y, por ejemplo, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, se saludaron con dos besos.

Sánchez pide unidad

Por su parte, el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, ha reclamado este martes a la OTAN que en la cumbre de Washington lance un “mensaje contundente” de unidad y cohesión, reforzando el vínculo transatlántico y trabajando por la paz. Gran parte de los líderes acudieron junto a sus esposas, pero Sánchez lo hizo en solitario y posó junto al resto de jefes de Estado o de Gobierno en la foto de familia del evento. Se situó en la segunda línea, flanqueado por el primer ministro húngaro y actual presidente de turno del Consejo de la UE, Viktor Orbán, y su homólogo belga, Alexander De Croo.

En un mensaje en las redes sociales, recalcó que la cumbre se celebra este año en un contexto internacional complejo y marcado por la persistencia de la agresión rusa en Ucrania, la guerra de Gaza y la inestabilidad en el flanco sur, e hizo su llamada a la unidad. Sánchez participará en las sesiones de la cumbre y en un foro organizado de forma paralela sobre el flanco sur. En sus intervenciones, según fuentes del Gobierno español, garantizará el pleno compromiso de España para seguir ayudando a Ucrania todo el tiempo que sea necesario y para incrementar los esfuerzos ante la inestabilidad del flanco sur.