Ya hacía meses que algunos diputados conservadores trabajaban para convencer a sus compañeros de presentar las solicitudes necesarias para provocar una moción contra Boris Johnson y esta ha acabado llegando. El primer ministro del Reino Unido se enfrentará este mismo lunes a una votación forzada por miembros de su mismo partido y él ya ha reaccionado, asegurando que la ve como una "oportunidad" para poner fin a "meses de especulación" sobre su Gobierno y liderazgo al frente del país, que la alta funcionaria Sue Grey cuestionó muy duramente en su informe sobre el PartyGate.
Una "oportunidad"
El mandatario ha indicado que "esta noche permitirá al Gobierno trazar una línea y continuar adelante por poder abordar las principales prioridades de la población", tal como ha indicado un portavoz de Downing Street en un comunicado al que ha tenido acceso The Guardian. "El primer ministro agradece la oportunidad de llevar su caso ante el Parlamento para poder recordarles que cuando están unidos y centrados en las cuestiones que importan no hay ninguna fuerza política más grande", se recoge en el texto.
Ha sido el diputado conservador Graham Brady, presidente del Comité 1922, que agrupa a los diputados conservadores, el encargado de anunciar que este mismo lunes por la tarde se llevará a cabo la votación de la moción contra el premier británico. Los resultados se conocerán hacia las 20.00, hora británica.
Silbado en el Jubileo
También se han empezado a pronunciar algunos de los miembros del gabinete de Johnson. La ministra de Exteriores, Liz Truss, lo ha defendido y le ha transmitido su apoyo, al mismo tiempo que ha pedido al resto de compañeros que se expresen en la misma línea: "Ha estado a la altura a la hora de gestionar la recuperación después de la pandemia y la agresión rusa de Ucrania", ha dicho en su cuenta de Twitter, antes de señalar que "ha pedido perdón por sus errores". El escándalo del PartyGate estaba al orden del día antes de que Putin invadiera Ucrania, pero con la guerra pasó a un segundo término. Ahora, después del Jubileo de platino de la Reina, en el que Johnson y su mujer Carrie, también multada por las fiestas, fueron silbados, ha llegado el momento de la verdad.
"Acabar con el delirio"
El ministro de Sanidad, Sajid Javid, ha destacado, por su parte, que la votación supone una oportunidad para "acabar con el delirio" y sacar adelante el plan de Gobierno. "Hay muchos desafíos de cara al futuro, así que es una oportunidad para que todos nuestros colegas apoyen el programa", ha matizado. No obstante, ha admitido que una moción de confianza "no es lo que le gustaría ver", pero ha expresado su "máximo respeto" hacia sus compañeros y ha matizado que entiende sus "frustraciones".
El ministro británico por Irlanda del Norte, Brandon Lewis, se ha sumado a esta visión y ha puesto el acento en el hecho de que Johnson "tomó buenas decisiones en materias importantes" y "se ha disculpado por los errores cometidos".