El Tribunal Supremo de Rusia ha rechazado este jueves el primer recurso interpuesto por el opositor Boris Nadezhdin contra las normativas de la Comisión Electoral Central (CEC) sobre la recogida de firmas para los aspirantes al Kremlin. El Supremo ha dado la razón a la CEC sobre que los recolectores tienen que estar empadronados en la ciudad donde recaudan las firmas.
Nadezhdin ha argumentado que, por este motivo, la comisión electoral ha considerado no válidas miles de firmas recogidas en Moscú entre ciudadanos de otras regiones. "Nosotros actuamos en el marco de nuestras competencias legales. Según estas normas, el recolector de firmas confirma que las recogió para un candidato en concreto y en una región específica, donde está registrado como persona autorizada," ha asegurado. Además, ha recordado que la ley federal no impide que los ciudadanos firmen donde lo consideren oportuno.
Nadezhdin no quiere rendirse todavía
Después de conocerse la decisión del Supremo, el conocido como candidato por la paz para ser lo único que se opone a la campaña militar rusa en Ucrania ha avanzado que apelará ante el Tribunal Constitucional. El Supremo todavía tiene que tramitar una segunda demanda del equipo de Nadezhdin sobre esta normativa de la comisión electoral, que rechazó la semana pasada su registro como candidato a la Presidencia.
Nadezhdin todavía no ha recurrido esta decisión de la CEC, que ha detectado errores en más del 15% de las firmas presentadas por el aspirante liberal.
La comisión ha establecido que el equipo del opositor cometió errores de forma, entre los cuales figurarían once almas muertas, al utilizar bases de datos no actualizadas. La campaña de recogida de firmas de Nadezhdin se ha convertido en la primera muestra masiva y legal de rechazo contra la guerra desde el inicio de la contienda en febrero del 2022.
La oposición acusa al presidente ruso, Vladímir Putin, de hacer todo el posible para impedir la participación de Nadezhdin, ya que teme que aglutine todos los descontentos no solo con la guerra, sino con la deriva autoritaria del Kremlin.
La CEC ha registrado a cuatro candidatos: Putin; el comunista Nikolai Kharitonov; el ultranacionalista Leonid Slutski y el representante de Gente Nueva, Vladislav Davankov.
Aunque aseguró públicamente que no lo haría, Putin reformó la Constitución en el 2020 para poder presentarse a la reelección, cosa que podrá volver a hacer dentro de seis años y, de esta manera, permanecer en el Kremlin hasta el 2036.