Francia y el Reino Unido han decidido posponer la visita del rey de Inglaterra, Carlos III, al país galo por las protestas y los disturbios por la reforma contra las pensiones, según ha confirmado este viernes el Elíseo en un comunicado. Carlos III tenía que iniciar el domingo un viaje de tres días que empezaba en Burdeos, una de las ciudades más afectadas por los disturbios, y donde incluso se ha incendiado la entrada del ayuntamiento. El rey inglés también tenía que visitar París por una cena en el Elíseo, y los sindicatos en huelga habían avisado de que no se instalarían alfombras rojas. Según el Elíseo, la decisión se ha tomado para poder recibir al monarca británico "en las condiciones que corresponden" a la relación "de amistad" entre Francia y el Reino Unido. En un comunicado, el equipo del presidente francés también ha informado de que la decisión la han tomado París y Londres después de una llamada entre Emmanuel Macron y Carlos III este viernes por la mañana.
El monarca británico tenía previsto viajar a Francia del 26 al 29 de marzo, en la primera visita de Estado a otro país desde que asumió la corona en septiembre del 2022. Además de París, donde sería recibido con todos los honores, la agenda también incluía una escala en Burdeos. El viaje se conoció al principio de marzo e incluía una segunda parada en Alemania, que en principio continúa en vigor.
Más de 450 detenidos
Los disturbios registrados durante las protestas convocadas han acabado en toda Francia con más de 450 detenidos, según ha informado el ministro de Interior, a Gérald Darmanin, que ha denunciado actos de violencia contra miembros de las fuerzas de seguridad y bienes públicos. En concreto, el Ministerio tiene constancia de 457 arrestos, otra vez con París como el principal epicentro de la novena jornada de paradas masivas. Solo en la capital se han registrado más de 900 incendios, ha explicado Darmanin en una entrevista este viernes a la cadena CNews. Precisamente el ministro del Interior, decía este viernes a primera hora de la mañana que el país estaba preparado para recibir la visita del monarca inglés, hecho que finalmente se ha decidido que no suceda.
Al ministro le preocupa la "radicalización" observada en ciertos grupos, ya que si bien la amplia mayoría de los manifestantes protestaron de manera pacífica contra las reformas, las autoridades han estimado que entre 1.000 y 1.500 individuos han protagonizado incidentes en París. Darmanin también ha dicho que 441 policías y gendarmes han sido heridos. No obstante, ha prometido que se sancionará cualquier exceso que hayan podido cometer de manera "individual" los agentes y ha anunciado que ya hay abiertas once investigaciones.
El Gobierno francés, por boca también del presidente, Emmanuel Macron, ha condenado la violencia en las manifestaciones, que los últimos días ha empeorado a raíz de la aprobación parlamentaria de una reforma que plantea, entre otras medidas, elevar a 64 años la edad de jubilación y ampliar el periodo de cotización para cobrar la pensión. Los sindicatos, movilizados en bloque desde el mes de enero, han advertido que continuarán con los paros.