El acercamiento del presidente español, Pedro Sánchez, a China no ha gustado nada a la Casa Blanca. El secretario del Tesoro de la Administración Trump, Scott Bessent, ha hecho público su disgusto y ha avisado de que, si España decide alinearse con Pekín, tocaría de muerte la economía del país. "Es como cortarse el cuello", ha lanzado a modo de advertencia en un foro de banqueros este miércoles. En su opinión, las exportaciones del gigante asiático inundarán el mercado europeo. "Tendrán que ir a parar a algún sitio", ha señalado recordando que los EE.UU. ha elevado los aranceles a los productos asiáticos hasta el 104%.

El líder socialista ha iniciado una gira asiática para buscar nuevos mercados para las exportaciones españolas en medio de la guerra arancelaria impulsada por Donald Trump. Este miércoles y mañana, jueves, visitará Vietnam, y el viernes, China. Ha sido durante una conversación con su homólogo en Vietnam, Pham Minh Chinh, cuando se ha mostrado crítico a las políticas anunciadas por Trump y ha dicho que "a nadie le interesa una guerra comercial. Nadie gana con las guerras comerciales"

La del viernes será la tercera vez en solo dos años que Sánchez se reúne con el presidente chino, Xi Jinping. Desde la Moncloa aseguran que el discurso de Sánchez estará en harmonía con el de Ursula von der Leyen y se le trasladará a China la voluntad de la Unión Europea de diversificar sus mercados y ganar autonomía respecto de los Estados Unidos.

El modelo de negocio chino "no se detiene nunca"

"Puedo decir al resto del mundo que el comentario de esta mañana, no estoy seguro de sí del primer ministro o el ministro de Economía de España, sobre que quizás se tendrían que aliar más con China, sería como cortarse un mismo el cuello. Porque les puedo asegurar que estas exportaciones chinas son como aquella película de Disney de las escobas cargando cubos de agua", ha dicho en referencia al clásico infantil Fantasía. "Este es el modelo de negocio chino. No se detiene nunca, siguen produciendo y produciendo, y haciendo dumping, y dumping", ha añadido.

Un frente común contra China

A pesar de todo, Bessent se ha mostrado esperanzado ante la posibilidad de llegar a un acuerdo para hacer frente al Gobierno chino. "Al final probablemente podremos llegar a un acuerdo con nuestros aliados y con los otros países que han sido buenos aliados militares, aunque no económicamente, y podamos hacer frente a China como un grupo".

Por su parte, el presidente de los Estados Unidos confesó el martes que espera llegar a un acuerdo comercial con China pronto. Según su opinión, el Gobierno de Xi Jinping está "desesperado" por empezar negociaciones con la Casa Blanca, hecho que les hace pensar que la llamada está al caer. "Pasará", afirmó en un mensaje en la red social Truth Social. El jefe del ejecutivo estadounidense afirmó también que el mandatario chino "quiere llegar a un acuerdo, pero no sabe como empezar a negociarlo".