El rey de Inglaterra, Carlos III, ha mostrado a lo largo de su vida un especial interés por la preservación de la naturaleza y en los últimos años ha abanderado iniciativas medioambientales y ha defendido públicamente la necesidad de proteger el planeta para ofrecer un futuro mejor a las próximas generaciones. El ascenso al trono no ha borrado su voluntad en este ámbito, y este viernes ha celebrado en el palacio de Buckingham una recepción para empresas relacionadas con la biodiversidad, ministros de varios gobiernos y representantes indígenas para encontrar soluciones para la protección de la biodiversidad. En concreto, se ha hablado sobre cómo implementar el Marco Mundial de la Diversidad Biológica, el acuerdo histórico al que llegaron 200 países el pasado mes de diciembre en la decimoquinta Conferencia de las Naciones Unidas sobre Diversidad Biológica, en la que se comprometieron a proteger y conservar al menos el 30% de la superficie terrestre y marina antes del 2030.
La recepción contó con la presencia de la secretaria de Estado del Reino Unido para Medio ambiente, Alimentación y Asuntos Rurales, Thérèse Coffey, que explicó que la reunión tenía como objetivo encontrar financiación privada para poder cumplir los objetivos del Marco Mundial de la Diversidad Biológica. Por este motivo, después de la recepción se celebró una reunión en Lancaster House en la que participaron miembros del gobierno del Reino Unido y empresarios para cerrar acuerdos.
Marc Palahí, un destacado experto en cambio climático
Entre las personas invitadas a la recepción estaba el catalán Marc Palahí, doctor en Ciencias Forestales y un experto destacado en cambio climático y bosques, que considera que tienen un papel esencial en el desarrollo de la economía circular. Palahí reside en Finlandia, donde desde el año 2015 es director del Instituto Forestal Europeo, una plataforma que combina política y ciencia y que trabaja para "conectar el conocimiento con la acción en la ciencia, las políticas y la empresa". Al mismo tiempo, es presidente de la Alianza Bioeconómica Circular, que tiene como objetivo "acelerar la transición a una bioeconomía circular que sea climáticamente neutral, inclusiva y prospere en harmonía con la naturaleza".
Fue precisamente el entonces príncipe Carlos de Edimburgo, quien estableció esta alianza en 2020, como aparte de la Iniciativa de Mercados Sostenibles, que Carlos III impulsó el mismo año en el Foro Económico Mundial, y que busca "construir un esfuerzo global coordinado que permita al sector privado acelerar la transición a un futuro sostenible". El de este viernes, pues, no ha sido el primer encuentro entre Carlos III y Palahí, que comparten la visión de que invertir en la naturaleza es la mejor garantía para el futuro del planeta y de la economía. Aunque no se han hecho públicos los acuerdos a los cuales llegaron las empresas y el gobierno del Reino Unido este viernes, es de esperar que Palahí siga colaborando con el jefe de la monarquía británica en la consecución de un planeta más sostenible.