La central nuclear ucraniana de Zaporiyia, ocupada por Rusia desde hace seis meses, ha perdido otra vez su principal conexión eléctrica con el exterior y ha tenido que desconectar otra vez uno de los dos reactores que continúan operativos, según ha informado el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA). Esta agencia de la ONU, que tiene desde el jueves dos inspectores a la planta, ha sido informada de la desconexión de la línea principal de energía, aunque la central sigue suministrando electricidad a través de una de reserva.

Esta conexión puede proveer también de energía en la planta, en caso de ser necesario. Además, ha sido desconectado de nuevo el reactor número 5, que empezó a funcionar el viernes después de haber sido apagado el día anterior a causa de un bombardeo en la planta, señala el OIEA en un comunicado, en qué indica que sus inspectores reciben la información directamente del personal ucraniano que todavía gestiona la instalación.

Otro reactor continúa operativo y facilita electricidad, tanto para la refrigeración y otros mecanismos de seguridad, como para el consumo de hogares y empresas. El director general del OIEA, que visitó el jueves la central, indicó en este comunicado que su equipo sobre el terreno recibe información "directa, rápida y fiable" sobre lo que pasa en la planta. "Se trata de una información crucial para evaluar la situación general de la central", ha expuesto Rafael Grossi, jefe de la agencia, en esta nota.

El diplomático argentino ha alertado muchas veces del riesgo de un accidente nuclear e insistió durante meses de la importancia de una visita de inspección y que el OIEA pudiera contar con expertos en la central para contribuir en evitarlo. Grossi emitirá la semana que viene un informe sobre la situación de seguridad a Zaporiyia, la central nuclear mayor de Europa.

La nuclear se tambalea y el Nord Stream cerrado hasta nueva orden

Rusia ha ejecutado este sábado la suspensión indefinida del suministro de gas en Europa a través del Nord Stream por un supuesto escape de aceite, y ha redoblado el pulso con Europa de cara al invierno, justo cuando Occidente promueve medidas para poner límites a los precios del petróleo y gas rusos. Todos los nombramientos para cada franja horaria este sábado se encuentran a cero, cuando poco antes del anuncio que cortaría el grifo completamente más allá de los tres días de mantenimiento, todo indicaba que reanudaría el tráfico, según los datos de la gestora del gasoducto, Nord Stream AGO.

El gasoducto operaba desde finales de julio solo al 20% de su capacidad, o lo que es el mismo, transportaba 33 millones de metros cúbicos diarios a Europa, pero todavía podía contribuir a llenar las reservas de gas del Viejo Continente.

Ahora el gas llega a Europa únicamente a través de Ucrania, pero también de manera reducida por la operación bélica rusa en el país (42 millones de metros cúbicos diarios), y por Turquía.

 

Imagen principal: central nuclear de Zaporiyia, la mayor de Europa, controlada por los rusos desde el mes de marzo / Unsplash