Hong Kong cancela la proyección de una película de terror basada en el clásico personaje de dibujos animados Winnie the Pooh "por razones técnicas". Se sospecha, sin embargo, que la verdadera razón son las comparaciones que se han hecho por parte de la disidencia política entre el oso y el presidente chino, Xi Jinping, y que no gustan nada a las autoridades. El filme supuestamente censurado por el gobierno es Winnie the Pooh: Sangre y miel, una película británica de terror en la cual el personaje principal aterroriza a un grupo de jóvenes universitarias, que se tenía que estrenar este jueves en la ciudad semiautónoma.
Cancelan una película de Winnie the Pooh en China
Moviematic, un grupo cinematográfico local que había organizado una proyección previa al estreno, anunció que el acontecimiento tuvo que cancelarse por "razones técnicas". En un comunicado emitido el martes, la distribuidora de la película en Hong Kong, VII Pillars Entertainment, anunció la cancelación de las proyecciones a Hong Kong y Macao sin indicar ningún motivo. "Sentimos la decepción y las molestias", lamentaron. La película se ha convertido en un nuevo símbolo de las "líneas rojas movedizas" de Hong Kong, ciudad que implantó una ley de censura cinematográfica en el 2021 con el fin de prohibir películas consideradas una amenaza para la seguridad nacional. La legislación también otorgaba poderes al secretario jefe de la ciudad para revocar la licencia de cualquier película si se consideraba "rencilla con los intereses de la seguridad nacional".
El personaje de dibujos animados censurado en China
Winnie the Pooh, creado en 1926 por el autor británico de libros infantiles A.A. Milne, está censurado en la China continental desde 2013, cuando los internautas empezaron a utilizar la imagen del oso de ficción para burlarse de Xi. Todo empezó en 2013, cuando Xi hacía su primera visita a los Estados Unidos como jefe de Estado y allí, paseando al lado de su entonces homólogo estadounidense, Barack Obama, empezó a hacerse viral un meme de los dos, comparándolos con Winnie the Pooh y su inseparable amigo Tigger. Otra comparación entre Xi y Winnie tuvo lugar en 2015 durante un desfile militar, donde en una imagen del osito en un automóvil de juguete se comparó al mandatario chino, convirtiéndose en la imagen más censurada del año, según la empresa de análisis político Global Risk Insights. El personaje infantil parece no gustar nada a las autoridades chinas, que hace años que lo censuran sin dar más explicaciones.