La cumbre de la OTAN que se está celebrando en Madrid y que acaba este jueves ha tomado decisiones importantes sobre la hoja de ruta de la Alianza para los próximos diez años. Además de decidir cuál era la posición de Rusia y la relación que se tendría a partir de ahora, también se ha tenido que decidir qué pasará con China y cuál será la relación que se tendrá a partir de ahora. China se opone "firmemente" al nuevo Concepto Estratégico de la OTAN, que considera "repleto de sesgos ideológicos y de valoraciones propias de la guerra fría", y denuncia que "ataca y difama maliciosamente a China".

"Treinta años después, la OTAN todavía continúa con su táctica de crear enemigos y de fomentar la confrontación de bloques. Este nuevo Concepto Estratégico ataca y difama maliciosamente a China. Daremos respuestas firmes y decididas a todo acto que socave nuestros intereses", afirma en un comunicado el portavoz de la Misión China ante la Unión Europea. El nuevo Concepto Estratégico de la Alianza aprobado el miércoles en Madrid advierte que China "desafía nuestros intereses, seguridad y valores".

La cumbre de la OTAN en Madrid se acaba

La Alianza Atlántica cierra este jueves la cumbre que ha sacado adelante su estrategia para los diez próximos años. Así, se ha comprometido a defender "cada centímetro" del territorio de todos sus socios y que ha pasado de considerar Rusia como socio estratégico a la amenaza más importante. Este jueves empieza la segunda y última jornada del encuentro que ha reunido durante dos días a una treintena de mandatarios.

La cumbre de la OTAN empezó este miércoles con el propósito de trasladar un mensaje de unidad y democracia ante las nuevas amenazas y se esperaba "crucial" por parte del secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, y el anfitrión del encuentro, Pedro Sánchez; y "verdaderamente histórica" para la del presidente de los EE.UU., Joe Biden. Estos dos días han servido a los aliados, que sumarán Finlandia y Suecia después del desbloqueo al cual han llegado los dos países con Turquía, para aprobar el nuevo concepto estratégico que guiará las políticas de la organización transatlántica ante los desafíos y las amenazas la década que viene y que sustituye lo que iluminaron en Lisboa en el 2010. Una cumbre que, entonces, ponía fin a la guerra fría en Europa y donde se pactó que Rusia pasaba a ser un socio estratégico de la Alianza.

El panorama, pero ha cambiado. Rusia ha pasado de socio estratégico a ser considerada una amenaza. Concretamente, la OTAN lo ha señalado como la "más significativa y directa amenaza" para la seguridad de los aliados y la paz y la estabilidad en el área euroatlántica. "La Federación Rusa es la amenaza más importante y directa para la seguridad de los aliados y para la paz y la estabilidad en la zona euroatlántica", recalca.

 

Imagen principal: Xi Jinping, presidente de la China / Europa Press