Tres días ha tardado China en responder la visita de la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, a los Estados Unidos, donde se reunió con Kevin McCarthy, presidente de la Cámara de Representantes. En las últimas horas, el Teatro de Operaciones del Este del Ejército chino ha notificado la organización de maniobras militares en torno a la isla. Estas serán tanto marítimas como aéreas y tendrán lugar en el norte y en el sur del territorio. Está previsto que empiecen este sábado y se alarguen hasta el próximo lunes, según han anunciado las autoridades. Los movimientos llegan después de que el pasado jueves, Pekín condenara la presencia de Tsai en Estados Unidos y ya adelantara que responderían a su "confabulación" con "medidas resueltas y efectivas para proteger la soberanía nacional y la integridad territorial". Taiwán ya ha expresado su condena a las maniobras, que han definido como un "acto irracional que pone en peligro la seguridad y la estabilidad regional".
Mientras tanto, las autoridades de seguridad marítima de la provincia sur oriental de Fujian, situada delante de Taiwán también han emitido dos comunicados, alertando de que se producirán ejercieras con fuego real en las aguas próximas a la costa china de esta provincia a partir de este sábado 8 de abril y hasta el día 20, tal como ha recogido el diario local Global Times. Antes de empezar estos movimientos militares, China había empezado a imponer sanciones a la representante del territorio ante los Estados Unidos, Hsiao Bi-khim, para pedir el apoyo al país de Joe Biden en su agenda independentista para provocar una confrontación en el Estrecho de Formosa, que separa el territorio continental de la isla. También han sancionado el Instituto norteamericano Hudson y la Biblioteca presidencial a Ronald Reagan para "proporcionar una plataforma para que Tsai participe en actividades separatistas".
Un paro en California que no ha gustado nada en China
El pasado miércoles, la líder de Taiwán hizo escala en California cuando volvía de un viaje oficial a Centroamérica. El jueves pronunció un discurso en un simposio organizado por el Instituto Hudson, que le dio un premio al Liderazgo Global y se reunió a legisladores norteamericanos. Todo recuerda a una situación similar que tuvo lugar el pasado mes de agosto, cuando Nancy Pelosi, que entonces todavía era presidenta de la Cámara de Representantes, visitó Taiwán. Eso molestó a mucho Pekín, que también respondió con maniobras militares similares a las actuales en torno a la isla ante un viaje que describió como una "traición deplorable".
Aparte de condenar las maniobras militar chinas, el ministerio de Defensa de Taiwán ha señalado a Twitter que ha encargado a las aeronaves, fuselajes y misiles "responder a estas actividades". Asimismo, han anunciado la incursión de 42 aviones militares chinos en la Zona de Identificación Aérea de Taiwán, de los cuales 29 atravesaron la línea media del Estrecho, que ha funcionado durante décadas como una frontera no oficial pero respetada entre los dos territorios.