Calles vacías y patrulladas por militares y policías en la ciudad de Cali (Colombia), después de que el viernes hubo 13 muertos y fuertes enfrentamientos entre manifestantes y las fuerzas de la orden que empezaron a disparar civiles.
Tal como recoge Efe, la tercera ciudad más importante de Colombia fue el epicentro de la violencia durante las protestas del viernes, el mismo día que se cumple un mes desde que se registran concentraciones y manifestaciones en el país. El alcalde de la ciudad, Jorge Iván Ospina, ha calificado el día 28 de mayo como un día "fatídico" y "doloroso".
La Policía Nacional, según constata la misma agencia, ha registrado 10 homicidios a Cali y ha expuesto que "sólo tres de ellos coinciden en lugares donde hubo actividades de protesta", y que el resto estarían relacionados con venganzas entre bandas, intolerancia y sicarios. Por este motivo, dicen, es difícil saber cuántos de estos homicidios han sido cometidos por hombres armados que salieron a desbloquear las calles y dispararon contra los encapuchados, a quienes atribuyen actos de vandalismo en la ciudad.
El director de Investigación Criminal e Interpol de la Policía, Fernando Murillo, ha reconocido este fin de semana estos hechos y ha dicho que "se presentó una situación especial donde unas personas vestidas como civiles utilizaron armas de fuego de manera indiscriminada contra personas", bajo la mirada de las fuerzas de seguridad.
¿Qué está pasando en Colombia?
Las protestas empezaron por la reforma tributaria propuesta por el presidente del país, Iván Duque, pero las manifestaciones y las protestas continúan, no solo por la oposición de la reforma sino ahora también por la brutalidad policial de los últimos días y descontento general de la gente por la gestión de la pandemia. La reforma consiste en añadir el Impuesto del Valor Agregado (IVA) del 19% en productos de consumo básico, como sirve funerarios, electrónica y otros servicios que hasta ahora no tenían IVA.
Los manifestantes pidieron al Congreso que no aprobara la reforma para centrarse en el salario mínimo. Y el gobierno justifica esta reforma para disminuir el efecto de la crisis del coronavirus.
Pánico y miedo
Después del día vivido la ciudad se levantó con pánico y terror porque en las redes sociales había noticias falsas de bloqueos en más de 1.080 ciudades de todo el país a partir del lunes.
Eso ha provocado que se vieran largas colas en los supermercados para comprar artículos de primera necesidad.