La Comisión Europea ha defendido este jueves el uso de la red social X para comunicar su gestión a los ciudadanos, aunque ha dicho que "está monitorando los acontecimientos" después de que algunos medios de comunicación hayan suspendido las cuentas en la plataforma, para considerar que contribuye a la desinformación.
Thomas Regnier, portavoz de la institución, ha indicado que X es una de las quince redes sociales que utiliza la Comisión para comunicarse, pero ha recordado que ya ha suspendido sus campañas publicitarias después de la investigación que el año pasado abrió para considerar que ha contribuido a la propagación de contenido terrorista después del ataque de Hamás contra Israel. Una investigación que podría culminar en una multa de hasta el 6% de los ingresos que el propietario de la plataforma, Elon Musk, obtiene a través de su imperio empresarial.
La Comisión utiliza las redes sociales que están a su disposición para llegar en las audiencias clave para comunicar sobre asuntos importantes para Europa. X es una de las 15 redes sociales en que la Comisión está activa y tiene una cuenta", ha dicho Regnier.
'La Vanguardia' y el 'The Guardian' dejarán de publicar en la red social X
El portavoz ha evitado por "cualquier comentario" sobre la medida que han tomado el diario español La Vanguardia y el británico The Guardian, después de que el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, nombrara Musk responsable de eficiencia gubernamental en su futuro Gobierno. Regnier ha dicho que, entre otros, la Comisión también tiene cuentas activas a Mastodon, Bluesky y Threads.
📌 'La Vanguardia' deja de publicar tuits de forma directa en la red social X, convertida en una red de desinformación desde la llegada de Musk https://t.co/z2HlbyIIL0
— La Vanguardia (@LaVanguardia) November 14, 2024
En diciembre de 2023, Bruselas abrió un procedimiento formal contra X para evaluar si esta plataforma podría haber violado la Ley de Servicios Digitales en áreas relacionadas con la gestión de riesgos, la moderación de contenidos, los patrones oscuros, la transparencia publicitaria y el acceso a datos para los investigadores.
Además, el ejecutivo comunitario mantiene abierta una investigación formal contra X porque considera que no ha combatido lo suficiente la propagación de contenido terrorista y porque cree que no es lo bastante transparente en el funcionamiento de sus algoritmos ni en los anuncios que muestra a sus usuarios.
Sin embargo, Bruselas ha descartado designar X como una gran plataforma en virtud de la ley antimonopolio de mercados digitales, por lo cual no lo obliga a cumplir con los requisitos más estrictos de las nuevas normas de competencia comunitarias