En la recta final de la campaña electoral, Javier Milei trató de distanciarse de los que lo etiquetaban como extrema derecha, Definiéndose siempre como un anarcocapitalista ultraliberal, los conceptos más tradicionales de la extrema derecha los trataba de esquivar. Sin embargo, se pueden querer evitar ciertas etiquetas, pero el programa electoral no engaña. Milei se ha vendido a él y sus políticas como rompedoras e innovadoras; el cambio que necesita Argentina. Pero muchas de estas son viejas conocidas de la derecha y la extrema derecha más. Así pues, ¿qué ha prometido Milei para erigirse presidente de Argentina?
🔴 El ultraderechista Javier Milei se impone a las elecciones en Argentina
Milei apuesta por reducir el Estado al mínimo: menos ministerios, menos administración, menos protección social, menos servicios públicos. En cambio, el nuevo presidente argentino quiere confiarlo todo al libre mercado. El candidato de extrema derecha rechaza lo que llama como "Estado paternalista" y quiere desmantelarlo, eso incluye eliminar cualquier ayuda social, incluso recortar los fondos de pensiones.
El ganador de las elecciones quiere apostar por el libre mercado hasta su máxima expresión, por ejemplo, ha defendido que la venta de órganos puede ser "un mercado más". Afirmación que ha defendido a capa y espada declarando: ¿"Quien decidió vender el órgano, en quá afectó a la vida, la propiedad o la libertad de los otros? ¿Quién sois vosotros para determinar qué tiene que hacer él con su vida?". También apuesta por abrir la puerta a un mercado legal de armas.
La promesa de la dolarización
El nuevo presidente argentino y economista ha pavimentado su camino hacia la Casa Rosada con promesas de solucionar todos los problemas económicos de Argentina, un país con un 142% de inflación, casi cronificada. Como pasa a menudo en los discursos de extrema derecha, Milei ha apelado a un pasado glorioso y romántico de argentina al que quiere devolver el país, nada muy lejos del Make America Great Again. Para conseguirlo, Milei quiere dolarizar la economía argentina, es decir, abandonar la moneda propia y adoptar el dólar.
Todo implica que el país pierde su soberanía monetaria, ya que se pasa a depender de las políticas de la Reserva Federal los Estados Unidos. El gran defensor de la libertad considera que adoptar el dólar aportará estabilidad y mejorará el poder adquisitivo de los argentinos. La receta de la dolarización no es garantía de éxito, por ejemplo, sí funcionó en Panamá, pero fue un desastre en Zimbabue.
Las políticas conservadoras de toda la vida
Milei quiere libertad, pero no para todo el mundo. La libertad de poder abortar no está entre su lista de políticas. Es más, no solo ha prometido prohibir el derecho al aborto, sino que sostiene políticas violentamente antifeministas. No solo carga contra las feministas, sino que constantemente contra cualquiera que considere ligeramente de izquierdas. Milei ha cogido la costumbre en campaña de acabar sus mítines insultando a la izquierda y sus seguidores.
En su cruzada contra la izquierda, cuestionan la violencia de Estado y la violación de los derechos humanos de la última dictadura argentina (10776-1981). Blanquea la dictadura de Jorge Rafael Videla y compara la violencia estatal con la de grupos políticos que luchaban en contra. Milei y su partido quiere imponer su visión de la dictadura y para hacerlo planea desarmar el Museo de la Memoria de Esma, entre otros. Es decir, reescribir la historia como más le conviene.