Varias decenas de soldados turcos murieron el jueves durante una intensa batalla con las fuerzas de Damasco en la provincia de Idlib, en el noroeste de Siria, la última región aún bajo control de milicias islamistas alzados en armas contra el régimen de Bashar al-Ásad.
Según aseguraron fuentes cercanas de las Fuerzas Armadas turcas a Efe, al menos una treintena de militares turcos fallecieron durante un ataque aéreo de la aviación siria o rusa contra las tropas turcas que combatían junto a los rebeldes.
El Gobierno turco ha convocado una reunión de urgencia para evaluar la situación, pero aún no ha dado información sobre el asunto.
El gobernador de la provincia turca de Hatay, Rahmi Dogan, declaró a la cadena NTV que los hospitales de esta región, fronteriza con Siria, habían recibido numerosos militares turcos gravemente heridos en un ataque aéreo en Idlib y que nueve soldados habían muerto.
Fuentes de partidos de la oposición, sin embargo, hablaban de un número de bajas claramente superior.
Varios altos cargos de diferentes partidos han anulado su programa previsto para acudir a reuniones extraordinarias, pero ante la falta de datos oficiales persiste la incertidumbre sobre la magnitud del ataque a las fuerzas turcas que se hallan estacionadas en Idlib.
Bombardeo turco
Tras la muerte de una trentena de soldados turcos, el ejército de ese país inició en la noche del jueves al viernes bombardeos aéreos y terrestres contra posiciones sirias. En un comunicado, el portavoz de la presidencia turca, Fahrettin Altun, aseguró que "los objetivos del régimen (sirio) han sido atacados con apoyo de fuego aéreo y terrestre".
Por su parte, Omer Çelik, portavoz del gobernante partido AKP, señaló en declaraciones a la emisora CNNTürk que "los autores de este ataque tuvieron la respuesta necesaria y así continuará".
Agregó que el gobierno turco hablará este viernes con la OTAN porque "un ataque contra Turquía es un ataque contra la OTAN". Fuentes cercanas de las Fuerzas Armadas turcas señalaron en la noche del jueves que los militares turcos fallecieron durante un ataque aéreo de la aviación siria o rusa.
Según la prensa turca, el ejército había asistido a las milicias rebeldes sirias para reconquistar la estratégica ciudad de Saraqeb, situada en la carretera entre Damasco y Alepo, que hace apenas tres semanas fue tomada por las fuerzas del régimen sirio.
Ankara lleva semanas instando a Moscú a frenar el avance del régimen de Al Asad, sin éxito por ahora.
Desde ayer, una delegación rusa se encuentra en Turquía para negociar un alto el fuego en Idlib, pero no se han difundido detalles sobre estas conversaciones.