Desde que el Kremlin ordenó a las tropas rusas que traspasaran las fronteras ucranianas y empezara la actual invasión, los países Occidentales han tratado de aislar el gobierno de Vladímir Putin y reducir su influencia internacional. Expulsiones de espacios internacionales y sanciones no han sido bastantes para que Rusia se quede sin sus aliados más poderosos y así se ve claramente en la cumbre de los BRICS que tiene lugar en el país. Desde el pasado martes, Putin es el anfitrión y marca el paso de la nueva cumbre de los BRICS en Kazán. Originalmente, el grupo lo conformaban las principales economías emergentes, que eran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, pero a principios de año se han sumado Egipto, Emiratos Árabes, Etiopía e Irán. Por si no fuera suficiente, en este encuentro se discutirá el ingreso de 15 países a su agrupación en calidad de socios. Todo pegado deja una imagen que no gusta a las potencias occidentales: un Vladímir Putin rodeado de aliados.

La reunión de los BRICS y de otros países esta semana pone de manifiesto una creciente red de nacional que esperan un cambio en el equilibrio global del poder, como es el caso de Moscú, Pekín y Teherán, en contraposición directa con Occidente liderado por los Estados Unidos, según analiza la CNN. El peso de los BRICS es innegable. Este grupo se formó el año 2006 y celebró su primera cumbre en la ciudad rusa de Ekaterimburgo. Los países que integran los BRICS suponen un tercio de la economía y el 40% de la población mundial. Según el Kremlin, una treintena de países han mostrado su interés de participar en las actividades de este grupo de una manera u otra.

En declaraciones a los periodistas viernes, Putin elogió la creciente influencia económica y política de los BRICS como un "hecho innegable". También dijo que si los BRICS y los países interesados trabajan juntos, "serán un elemento sustancial del nuevo orden mundial", aunque negó que el grupo fuera una "alianza antioccidental", según recoge la misma cadena estadounidense. En este medio, Alex Gabuev, director del Carnegie Russia Eurasia Center en Berlín, ha apuntado que: "El mensaje será: como se puede hablar del aislamiento global de Rusia cuando (todos estos) líderes vendrán en Kazán".

Reuniones y fechas claves para Putin

Putin ha recibido a todos los líderes internacionales que participan en la cumbre, dejando imágenes de complicidad con Xi Jinping, líder chino, o Narendra Modi, primer ministro de la India. En los próximos días tendrá otros encuentros bilaterales con países que son estrictamente de este grupo, si no más bien de su órbita. Por ejemplo, el líder del Kremlin se encontrará con el mandatario turco, Recep Tayyip Erdogan, y una delegación palestina.

La expectación sobre las palabras de Putin los próximos días en el marco de la cumbre es inmensa, ya que hay que tener en cuenta que llegarán pocos días antes de las elecciones de los Estados, donde el Kremlin té muy en juego. Según ya ha puntuado el mismo Donald Trump, de volver a la presidencia intervendría en Ucrania a favor de los intereses rusos.