Y, finalmente, 9 de mayo. Día de la Victoria, ampliamente celebrado en Rusia. El presidente ruso, Vladímir Putin, se toma los aniversarios seriamente. De hecho, no fue una coincidencia que la invasión en Ucrania se produjera un día después del Día del Defensor de la Patria –que se celebra el 23 de febrero, un día antes que empezara la guerra en Ucrania, el día 24–. El líder ruso hizo algo similar el año 2014, cuando se anexionó Crimea a través de protestas prorrusas. Pero 75 días de guerra después, hay pocas cosas por celebrar.
Putin esperaba tener más cosas para celebrar este lunes, la fecha más patriótica del país. La fecha, simbólica, marca el papel de la Unión Soviética en la derrota de la Alemania nazi en la Segunda Guerra Mundial. Fue el día 8 de mayo de 1945 (9 de mayo en zona horaria de Moscú) que Alemania firmó su Acta de Rendición en Berlín, poniendo punto final a la guerra en Europa. La URSS sufrió pérdidas importantes, ya que se calcula que 27 millones de soldados y civiles murieron. De eso y de encontrar a los soldados soviéticos que todavía no han sido desenterrados, va lleno el canal de Russia Today un día como hoy.
Según destaca la CNN, la justificación de Rusia por la guerra en Ucrania sugirió como fecha límite para el éxito el Día de la Victoria. Putin y su gobierno han dicho reiteradamente que el objetivo del renombre 'operación especial' es "desnazificar" Ucrania y liberar el país de los nazis es una cuestión de supervivencia rusa. Este argumento, no sería de peso para la comunidad internacional y sería simplemente una herramienta para despistar. A pesar de todo, con el fin de avalarlo, la propaganda del Kremlin ha estado funcionando a todo trapo para justificar la invasión. Sin embargo, para Putin será complicado justificar el gasto militar y las pérdidas de soldados desde el inicio de la invasión.
Putin, sin embargo, no se puede permitir una derrota. El ejército ruso supera, de largo, el ucraniano en todos los aspectos, incluso, con las armas pesadas que envía Occidente, desde hace semanas. A pesar de todo, no ha podido hacerse con territorio en el norte del país, y tampoco con la capital. Ahora estaría enfocado en la región del Donbás, pero tampoco parece tener el éxito esperado. De hecho, un documental que se estrena en RT es Donbass, yesterday, today and tomorrow (Donbass, ayer, hoy y mañana). En la descripción se puede leer que "han pasado casi 7 años desde que un golpe de estado inspirado por los Estados Unidos dividió Ucrania y empezó la guerra en el este del país".
Las fuerzas armadas de Ucrania afirman que Rusia ha perdido más de 24.000 soldados en poco más de dos meses y más de 1.000 tanques y 2.600 vehículos blindados y centenares de aviones. La CNN, sin embargo, no puede confirmar estos datos y resaltan que es posible que las pérdidas en Ucrania sean similares.
Los planes de Moscú
La batalla en Mariúpol hace semanas que dura, y Rusia está bombardeando sin descanso una enorme planta siderúrgica. Si la planta cae, la ciudad será 'suya'. Por otra parte, también numerosos informes de inteligencia constatan que Rusia se plantea anexionarse Lugansk y Donetsk "en algún momento del mes de mayo" y también podría declarar y anexionarse una "supuesta república popular" a la ciudad de Jérson.
Los datos del Centro Levada, constatan que los rusos dan apoyo a la guerra y un 68% cree que se está llevando término con éxito. La popularidad de Putin, en este sentido, también se ha disparado al 82%. Se espera que este lunes Putin pronuncie un discurso y líderes y observadores mundiales están a la expectativa de lo que pueda pasar. En este sentido, la semana pasada, el secretario de Defensa del Reino Unido, Ben Wallace, sugirió que Putin podría abandonar la "operación militar" y declarar abiertamente la guerra. Un hecho que podría desencadenar una gran movilización de combatientes rusos e incluso reclutar civiles. Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, tildó estas palabras de "tonterías". Habrá que esperar.