El multimillonario y propietario de Twitter (ahora X), Elon Musk, hace años que sostiene posiciones políticas escoradas a la extrema derecha. Musk siempre ha intentado influir en la política de los Estados Unidos y del resto del mundo. Por ejemplo, acogió en Twitter la presentación de la candidatura a presidenciable republicano de Ron DeSantis, gobernador de Florida, y de los más radicales del Partido Republicano, así como ha dado apoyo públicamente a Javier Milei, actual presidente argentino. Su siguiente paso en su influencia en el escenario global de la extrema derecha es dar 41,3 millones de euros en el mes para la campaña de Donald Trump.
Según informa The Wall Street Journal, Musk ha dicho que tiene previsto dar el dinero a America PAC, un tipo de comité de acción política (súper PAC) que puede obtener donaciones de individuos, corporaciones y sindicatos y gastar cantidades ilimitadas. El diario estadounidense cita fuentes próximas al multimillonario, que confirman el cambio de opinión que ha hecho con respecto a las elecciones estadounidenses. Hace unos meses afirmó que no daría a ningún candidato, sin embargo, el sábado, después del atentado contra Trump, pidió el voto para los republicanos.
America PAC, creada en junio, ya ha recibido donaciones de otros empresarios como Joe Lonsdale (Palantir); Cameron y Tyler Winklevoss (Gemine) o Joe Craft (Alliance Resource Partners) y su mujer Kelly Craft (exembajadora de los EE. UU. en la ONU), indica el diario. De acuerdo con documentos presentados a las autoridades, America PAC recibió unos 8 millones de euros en donaciones en el trimestre más reciente, por lo cual la suma a la que se ha comprometido Musk tendría un impacto sustancial.
Musk y su agenda de extrema derecha
Desde que compró Twitter el año 2022, las políticas empresariales que ha implementado en la plataforma hacen que los discursos de extrema derecha campen a sus anchas por esta. Varios estudios muestran cómo ha habido un aumento del discurso de odio en la plataforma. Una de las entidades que denunció este aumento del discurso del odio fue Center for Countering Digital Hate (Centro contra el Odio Digital, o CCDH). La organización había constado que los usuarios que pagaban para estar verificados (idea del mismo Musk), tenían más manga ancha para difundir ideas de extrema derecha y discursos de odio sin consecuencias. Musk los demandó sin éxito.
Elon Musk se ha convertido en un gurú de la extrema derecha por todo el mundo y, en concreto, en Silicon Valley. Según publicaba el The New York Times el pasado mes de mayo, los CEO, inversos y propietarios de la meca de la tecnología occidental cada vez son más conservadores.