Nueva controversia en torno al Canal de Panamá, una vía estratégica para el comercio mundial. Primero fue la cuestión de la soberanía del canal, cuando Donald Trump ya puso el canal en su punto de mira desde antes de asumir la presidencia de los Estados Unidos, amenazando con recuperar el control del canal (bajo control panameño desde 1999), que ha provocado tensiones diplomáticas entre los dos países. Ahora se ha abierto una nueva disputa geopolítica y económica sobre las tarifas de navegación que afectan a los barcos norteamericanos. El Departamento de Estado de los Estados Unidos aseguró este miércoles que sus barcos podrán transitar a partir de ahora por el Canal de Panamá sin pagar tasas, después de la reciente visita a Panamá del jefe de la diplomacia del gobierno Trump, Marco Rubio. Pero la administración del canal de Panamá lo ha negado. Las polémicas abiertas por Donald Trump sobre el Canal de Panamá han desencadenado un gran debate y malestar en el país, que ve peligrar su soberanía sobre esta vía, pero también tensiones en otras regiones del continente, y en la geopolítica mundial.

Comunicados que se contradicen

"El Gobierno de Panamá ha acordado no cobrar más tasas a los barcos del Gobierno de los Estados Unidos que transitan por el canal de Panamá. Eso ahorra al Gobierno norteamericano millones de dólares al año", dice un breve comunicado publicado el Departamento de Estado en su perfil de la red social X. Pero a través de la misma red, la Autoridad del Canal de Panamá, "facultada para fijar los peajes y otros derechos para transitar por el Canal" ha comunicado que "no ha realizado ningún ajuste de los mismos". La autoridad del canal, sin embargo, continúa en tono más conciliador que "con absoluta responsabilidad" que están "en disposición para establecer un diálogo con los funcionarios pertinentes de los Estados Unidos con respecto al tráfico de los buques de guerra de este país".

La interferencia china

A los Estados Unidos les preocupa la supuesta influencia china en el Canal de Panamá y considera que "la influencia y el control del Partido Comunista chino" sobre el canal supone una amenaza y una violación del Tratado de Neutralidad. Eso quedó claro en la visita que el secretario de Estado norteamericano realizó entre el 1 y el 3 de febrero en Panamá, rodeada de un rechazo popular a las calles de Ciudad de Panamá por las amenazas de Trump sobre el canal. Rubio expresó las inquietudes sobre esta supuesta influencia china en las reuniones que mantuvo con el ministro de Exteriores panameño, Javier Martínez-Acha, y también con el presidente del país, José Raúl Mulino, y exigió "cambios inmediatos" en su administración. Mulino dejó claro que "el Canal es y seguirá siendo panameño", pero se mostró abierto a cooperar con los Estados Unidos. El presidente panameño también informó a Rubio de que Panamá no renovará el acuerdo con China relacionado con la nueva Ruta de la Seda.

Trato con la Marina de los EE.UU.

Entre los posibles acuerdos que se pusieron sobre la mesa en la visita de Rubio está el de optimizar la prioridad en el tráfico de los barcos de la Marina norteamericana, aunque no se dieron más detalles. "La Autoridad del Canal de Panamá comunicó al secretario Rubio su disposición de trabajar con la marina de guerra de este país para optimizar la prioridad en el tráfico de sus barcos a través del Canal", informó entonces a la entidad en un comunicado, poco después de la visita del jefe de la diplomacia norteamericana a la vía, donde se reunió con el administrador, Ricaurte Vázquez. Desde la inauguración del canal, en 1914, el peaje que pagan los barcos de guerra, de cualquier nación, incluyendo los Estados Unidos, se calcula en función de las toneladas de desplazamiento máximo de agua, igual que para las dragas y diques secos flotantes, de acuerdo con el CP. Esta estructura de peaje es diferente de la que se utiliza para establecer el peaje de los barcos comerciales.

El precio para atravesar el Canal de Panamá varía según el tipo y la dimensión del barco, así como de otros factores. Un barco menor de 15 metros de eslora puede pagar en torno a los 800 dólares, con una franquicia adicional de 850 dólares, mientras que los buques comerciales, los portacontenedores o los buques de pasajeros pagan en función del CP/SUAP, que significa Canal de Panamá/Sistema Universal de Arqueo de Buques, un sistema de medida para calcular el tonelaje de los barcos y que se basa en una fórmula matemática que determina el volumen total del buque. Una tonelada neta CP/SUAP equivale a 2,83 m³ de capacidad volumétrica. Así, por ejemplo, un buque regular menor de 10.000 toneladas paga 3,50 dólares por CP/SUAP.

Quejas de trato injusto

Los Estados Unidos consideran que sus barcos "reciben un trato injusto", aunque las autoridades panameñas aseguran que los barcos del país norteamericano pagan las mismas tarifas que el resto, en virtud del Tratado de Neutralidad. Según las cifras oficiales de la Autoridad del Canal de Panamá, proporcionadas a EFE, desde 1998 hasta el cierre fiscal 2024 (26 años), el tráfico de los barcos de guerra y submarinos de Marina de los Estados Unidos han supuesto el 0,03% del tráfico del Canal. Eso son 994 barcos de los 373.039 que transitaron por la vía interoceánica en todo este tiempo. "En este periodo de tiempo, los ingresos de tráfico en este concepto han sumado 25,4 millones de dólares, cosa que equivale a menos de un millón de dólares al año", detalló la autoridad del canal.