El ejército israelí ha confirmado que consiguió con éxito su objetivo cuando bombardeó este viernes varios edificios residenciales en el sur de Beirut, donde se encontraba el cuartel general de Hizbulá, que no era otro que matar al líder de la milicia chií, Hasan Nasrallah. "Hasan Nasrallah está muerto", ha avanzado este sábado en un breve mensaje en la red X (antes Twitter) el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI), Nadav Shoshani, aunque Hizbulá no ha confirmado la veracidad de la información. Poco después, la misma cuenta de las FDI en la red X también hacían una publicación en la que aseguraban que "Hasan Nasrallah ya no podrá aterrorizar en el mundo". El Ejército ha destacado que durante los 32 años que ha estado al frente de Hezbolá ha sido responsable de "muchos asesinatos" tanto de civiles como de soldados israelíes, así como de actos de terrorismo en otras partes del mundo.  Los medios de Israel ya daban por muerte al líder de Hizbulá este viernes a la noche, después del último bombardeo, que ha dejado al menos seis muertos. El Canal 12 informaba de que la sensación en Israel es que la operación había sido un éxito y que Nasrallah había sido eliminado, pero la confirmación por parte del ejército no ha llegado hasta esta mañana. Los bombardeos, sin embargo, continuaron durante la madrugada y la mañana de este sábado, e Israel ha informado que en total ha bombardeado "140 objetivos terroristas de Hezbolá".

Eliminados otros comandantes de la milicia

Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) habían anunciado horas antes la muerte de otro comandante de la unidad de misiles del partido-milicia chií Hezbollah, Mohamed Ali Ismail, así como otros líderes del grupo en los bombardeos de la tarde de este viernes contra distintos puntos del Líbano. "Aviones de combate de la Fuerza Aérea atacaron y mataron a los terroristas Mohamed Ali Ismail, comandante de la unidad de misiles de Hezbollah en el sur de Líbano, ya su adjunto, el terrorista Hussein Ahmed Ismail. Con ellos fueron eliminados otros comandantes y terroristas de Hezbollah", indicaron en su cuenta de la red social X. Ali Ismail era responsable de dirigir numerosos ataques terroristas contra el Estado de Israel, incluyendo el lanzamiento de cohetes hacia territorio israelí y el disparo de un misil tierra-tierra hacia el centro de Israel el miércoles. Esto sigue la eliminación del terrorista Ibrahim Muhammad Qabisi, jefe de la Fuerza de Misiles y Cohetes de Hezbollah, así como de otros comandantes de alto rango de esta unidad”, informan las FDI.
 
Los bombardeos que los cazas de la FDI realizaron el viernes contra edificios residenciales ubicados en el sur de Beirut se justificaron bajo el argumento de que estos albergaban "armas pertenecientes a Hezbollah" bajo sus cimientos. En un comunicado, el ejército israelí ha informado que "el ataque se llevó a cabo mientras la cadena de mando superior de Hizbulá operaba desde el cuartel general y promovía actividades terroristas contra los ciudadanos del Estado de Israel", dice el texto, sin aportar pruebas. El mensaje es simple: cualquiera que amenace a los ciudadanos de Israel, sabremos cómo llegar a ellos: en el norte, en el sur y en lugares más lejanos", dijo por su parte el jefe del Estado Mayor del Ejército, Herzi Halevi, tras confirmarse la muerte de Nasrala.
 
Su portavoz, Daniel Hagari, justificó estas actuaciones alegando que el grupo "tiene más de 150.000 cohetes destinados a matar a civiles israelíes" y que algunos se encuentran "colocados estratégicamente bajo la población civil". Previamente, el portavoz en árabe del Ejército israelí, Avitxai Adrai, había pedido a la población libanesa "evacuar los edificios y mantenerse alejados a una distancia de no menos de 500 metros" por su "seguridad y la de sus seres" queridos". Muchos libaneses optaron por refugiarse o salir de sus casas para evitar las bombas, creando un colapso en las calles de Beirut en plena noche.