Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han iniciado la tarde de este miércoles la primera retirada de tropas en el sur del Líbano en el marco del acuerdo de alto el fuego entre Hizbulá e Israel, cerrado el 27 de noviembre con la mediación de los Estados Unidos, entre otros. Así lo ha explicado el Mando Central de los Estados Unidos (CENTCOM), un organismo unificado de seguridad que actúa como supervisor sobre el terreno. "Este es un primer paso importante en la implementación de un cese duradero de las hostilidades y establece las bases para un progreso continuo", ha celebrado el jefe del CENTCOM, el general Michael Kurilla, presente durante la retirada de las FDI y el reemplazo del ejército del Líbano en la región de Maryayún, en el sur del país.

Kurilla ha declarado después de una reunión con el comandante de las Fuerzas Armadas libanesas, Joseph Aoun, y el general norteamericano Jasper Jeffers, que codirige con el delegado francés el mecanismo, de supervisión del cese de las hostilidades entre las FDI y Hizbulá. En consecuencia de este primer movimiento de los hebreos, el ejército libanés ha confirmado en la red social X el despliegue de sus soldados en "cinco localidades en los alrededores de Jiam", al lado de la Fuerza Interina de Naciones Unidas para el Líbano (FINUL).

Una vez todas las tropas libanesas estén repartidas sobre el terreno, las unidades especializadas iniciarán la segunda fase del despliegue, una prospección de ingeniería con el objetivo de "retirar las municiones no detonadas", como las minas antipersonales. En este sentido, el mando del ejército ha pedido a los ciudadanos de Jiam y sus alrededores "no acercarse a la zona y acatar las instrucciones de las unidades militares hasta que finalice el despliegue". Por su parte, las FDI han confirmado en las redes sociales que "su misión" en Jiam ha concluido, pero han advertido que "permanecen desplegadas en el sur del Líbano y operarán contra cualquier amenaza para el Estado de Israel y sus ciudadanos".

Israel y Hizbulá firmaron un acuerdo de alto el fuego después de un año de conflicto en el que las autoridades estiman que han muerto más de 3.600 personas y 15.300 han sido heridas en el Líbano. Una situación que escaló a raíz de la ofensiva iniciada por el ejército israelí el 1 de octubre del 2024. El agravamiento de las hostilidades se enmarca dentro de los enfrentamientos abiertos hace más de un año, después de que Hizbulá respondiera a los ataques de Israel por la matanza del 7 de octubre de 2023.