Japón vive este domingo elecciones anticipadas. Shigeru Ishiba asumió el cargo de primer ministro del país el pasado 1 de octubre y convocó los comicios antes de tiempo. Ahora bien, hay varios problemas sobre la mesa, porque los precios no paran de subir y los salarios están estancados. Todo eso, podría hacerle perder a su partido la mayoría absoluta. Después de su nombramiento a principios de mes, Ishiba dijo que en materia económica se centrará en la promoción de medidas para impulsar más subidas salariales en el país, que cuenta con una inflación sostenida en torno al 2%, el objetivo marcado por el banco central nipón.
Aludió también al "nuevo capitalismo", la estrategia económica promovida por su predecesor, Fumio Kishida, y dijo que igual que dará apoyo al gasto de los hogares y tratará de mitigar el impacto de las subidas de precios, destaca Efe. "El gran problema de Japón es el creciente coste de la vida. Los votantes pueden tolerar que el partido gobernante sea corrupto siempre que a ellos les vaya bien. Pero cuando la gente empieza a oír que empeora el nivel de vida, eso es lo que de verdad los enfada", explicó en una entrevista con Efe Jeff Kingston, director de Estudios Asiáticos de la Universidad Templo de Japón.
Este experto considera que muchos nipones prefieren dar su voto al Partido Liberal Democrático (PLD) –el partido de Shinzo Abe, ex primer ministro, asesinado en el 2020–, un partido que ya conocen y que está en el gobierno casi de forma ininterrumpida desde 1955. "Creo que el PLD perderá votos, aunque no tantos como apuntan algunas predicciones", destacaba Kingston en referencia al efecto que tendrá en las urnas el escándalo de financiación irregular que desembocó a la dimisión de Kishida.
Antes de que Ishiba disolviera la cámara y convocara los comicios, la formación que encabeza contaba con 256 asientos, 23 por encima de los 233 que marcan la mayoría simple. Al lado de Komeito, su socio en coalición, los dos partidos sumaban 288 del total de 465 escaños. Algunos sondeos señalan que el PLD podría perder su mayoría parlamentaria este domingo y necesitar escaños del Komeito para seguir al poder.
¿Quién es quién de los candidatos?
La llegada al gobierno de Ishiba después de las primarias del PLD fue recibida con preocupación en los mercados con caídas próximas al 5%, en un fenómeno que fue conocido como "Ishiba Shock" (la conmoción de Ishiba). La intención era subir los impuestos y unas declaraciones que hizo sobre política monetaria del país, ante su recuperación, que no cayeron muy bien. "Ishiba ha apostado por mantener la política de 'nuevo capitalismo' planteada por Kishida, y habló de imponer nuevos impuestos sobre los dividendos y las ganancias de capital, pero no ha vuelto a mencionar esta última medida después de ver la reacción de los mercados", añadió Kingston.
Con respecto a la normalización de la política monetaria del país, el mandatario también ha enviado un mensaje abstracto, diciendo que el Banco de Japón (BoJ) "es el que tiene que conseguir la estabilidad de precios", todo y que sí que ha asegurado "una estrecha colaboración" con lo mismo. El primer día de campaña electoral, el mandatario anunció una ampliación del presupuesto para el actual año fiscal con vistas a aliviar los efectos de la inflación a los hogares e incentivó el consumo.
¿Qué dicen las encuestas?
Hay que recordar que, como se ha mencionado, la formación gobernante de Japón, el Partido Liberal Democrático y su socio en coalición, el budista Komeito, podría perder la mayoría a las elecciones generales, según ha revelado la última encuesta de la agencia de noticias nipona Kyodo. El objetivo del PLD se ha marcado la meta de alcanzar al menos 233 escaños en coalición, sin embargo, una encuesta telefónica realizada a unos 190.000 votantes por Kyodo, proyecta que la coalición podría tener dificultades para mantener esta mayoría. Esta situación podría cambiar antes de la votación del domingo, ya que más del 20% de los encuestados habrían manifestado que todavía no habían decidido qué candidato dar apoyo.
Las crisis políticas de Japón
Desde las últimas elecciones generales del 2021, el primer ministro, Fumio Kishida, se ha visto salpicado por varias crisis políticas. Sin ir más lejos, el asesinato de Shinzo Abe en el 2022. Eso lo llevó a un escrutinio mayor contra las acusaciones en torno a la Iglesia de la Unificación y su enlace con su PLD. La estrecha relación entre el partido y la iglesia provocó una caída en el índice de aprobación del gabinete de Kishida, y llevó a la primera reorganización del gabinete el 10 de agosto y a la segunda reorganización en septiembre del 2023 para destituir a los miembros del gabinete afiliados a la iglesia. El gobierno de Kishida se vio todavía más perjudicado por el escándalo de corrupción de fondo para sobornos a todo el partido a finales de 2023, un hecho que hizo caer su aprobación.
Los principales problemas del país
La despoblación y la baja natalidad son un problema para Japón. De hecho, se ha definido como "una emergencia silenciosa". En este sentido, el nuevo primer ministro ha asegurado que buscará vías de apoyo a la maternidad y a la conciliación para frenar la caída de los nacimientos en el país, y para contener el declive demográfico que afecta a las zonas rurales. Aunque no apuntó a ninguna medida concreta, dijo que su ejecutivo intentaría implementar reformas en relación con los estilos de trabajo del país, como la reducción de la jornada laboral o la introducción de un horario laboral flexible que facilite la crianza de niños, destaca Efe.
Con respecto al "Japón vacío", ha afirmado que "las regiones son el principal motor del crecimiento", y que se tiene que trabajar con los gobiernos locales e incrementar subvenciones para invitar a la gente a las zonas rurales e incrementar el impulso. "La experiencia de Ishiba como ministro de Revitalización de Áreas Rurales puede ser beneficiosa para el PLD. Las zonas rurales están sobre-representadas en el sistema electoral nipón, y estos votantes pueden considerar Ishiba un buen candidato para reactivar zonas en declive", ha concluido el mencionado experto, a la misma entrevista con la agencia.
¿Por qué hay elecciones anticipadas en Japón?
El 30 de septiembre de 2024, el exministro de Defensa Shigeru Ishiba, que ganó a las elecciones presidenciales del partido del 27 de septiembre, anunció oficialmente que convocaría elecciones anticipadas para el 27 de octubre, un año antes que expirara el mandato actual, para pedir la confianza de la población. Después de la toma de posesión como primer ministro el 1 de octubre, la Cámara de Representantes se disolvió el 9 de octubre, y las elecciones se anunciaron el día 15 y las votaciones tuvieron lugar el 27.