Nueva polémica con Josep Borrell. El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad ha recibido nuevamente críticas por su política en conflictos internacionales. Esta vez por el conflicto entre Kosovo y Serbia. De hecho, Borrell no ha sido el principal protagonista de la polémica, sino que lo ha sido el portavoz de su comisionado, Peter Stano.
Concretamente, el eurodiputado de los Verdes (el mismo grupo parlamentario europeo del cual forma parte Esquerra Republicana) Reinhard Bütifoker ha acusado al exministro español de hacer "políticas fallidas" con el conflicto entre los dos países de los Balcanes. Bütifoker considera que utiliza una política "muy sesgada e injusta", ya que considera que el portavoz de Borrell favorece a Serbia en unas declaraciones del pasado jueves en la Comisión Europea. "Abraza al gobierno serbio autoritario y critica y sanciona Kosovo", asegura el eurodiputado en un tuit.
La UE acusa Kosovo de mostrar "incapacidad" para actuar de forma europea
De hecho, Stano acusó Kosovo, en una rueda de prensa, de "mostrar incapacidad para comportarse de una manera europea" y ha explicado que la UE ha introducido "unas ciertas medidas contra el gobierno de Kosovo por su falta de habilidad para empezar a actuar de manera europea y tomar medidas para la desescalada".
Asimismo, se ha negado a decir lo mismo sobre Serbia, y lo acusan de desestimar la carta de los principios políticos de los Estados Unidos y la Unión Europea por el apaciguamiento de Serbia.
Carta a Borrell
De hecho, Borrell recibió una carta el pasado jueves firmada por 56 políticos que instaba al alto comisionado europeo a cambiar el enfoque de la relación con Kosovo y Serbia. La carta también fue recibida por el secretario de Estado de los Estados Unidos, Antony Blinken, y el secretario de Relaciones Exteriores del Reino Unido, James Cleverly.
El mismo Stano aseguró que Borrell respondería por carta a las demandas de los 56 políticos y eurodiputados, a pesar de recordar que las políticas europeas se deciden por "unanimidad de los 27" y que la Unión Europea es un "facilitador imparcial" en el diálogo entre Serbia y Kosovo.
Sin embargo, el portavoz de Borrell ha explicado que los 27, junto con los Estados Unidos, podrían "introducir las medidas necesarias contra Serbia" si los 27 consideran que no hace nada por desescalar la situación. "Lo que la UE espera de las dos partes es un comportamiento europeo para tratar de encontrar soluciones", dado que los dos quieren unirse a la UE, señaló el mismo portavoz.
Las tensiones entre Kosovo y Serbia han ido aumentando los últimos meses a causa de un conflicto en su frontera en el norte del país kosovar. El motivo ha sido la expiración el pasado 1 de agosto del 2022 del periodo de validez de once años de los documentos para automóviles con la placa de la antigua República yugoslava de Serbia. Asimismo, hay que recordar que Serbia no reconoce la independencia de Kosovo y, por eso, los kosovares movilizaron parte de sus tropas en la frontera con Serbia días antes de acabar el periodo de acuerdo. Quien tampoco reconoce la independencia son Rusia, China y el estado español, mientras que la gran mayoría de países de la Unión Europea sí que lo hace.