Estados Unidos y Corea del Norte se encuentran en una situación de máxima tensión después de varios episodios bélicos que han convertido lo que hasta ahora era un riesgo latente en un peligro real e "inminente" de guerra.

A esta situación se ha llegado a raíz de los conflictos descritos a continuación:

1. Primer misil lanzado durante el mandato de Trump

Durante el encuentro de Donald Trump, presidente norteamericano, y Shinzo Abe, líder Japonés, el pasado 12 de febrero, Kim Jong-un, líder norcoreano lanzó un misil de corto recorrido al mar.

Este lanzamiento supuso el primero desde que Trump era presidente, y se decretó que el misil no era intercontinental, por lo que no se interpretó como una amenaza para los Estados Unidos.

Sin embargo, los norcoreanos llevaban desde octubre de 2016 sin enviar ningún misil, por lo que se percibió como el inicio de una nueva etapa.

2. Prueba con cuatro misiles de golpe

El 6 de marzo, poco más de un mes después del primer lanzamiento descrito, Jong-un realizó una nueva prueba balística similar a la anterior, de medio rango y también al mar, pero en este caso usando cuatro misiles.

3. Demostración de fuerza y poder

Con motivo del 105 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, fundador del país, se llevó a cabo en Pyongyang, capital de Corea del Norte, un desfile del ejército nacional en el que se mostraron misiles nunca visto antes: el Pukguksong-1 y el Pukguksong-2, de alcance intercontinental y capaces de ser enviados desde submarino y plataformas móviles.

Esta demostración de fuerza, realizada el 15 de abril, fue percibida como una amenaza para los Estados Unidos, que antes de la misma ya sabían del desarrollo de misiles intercontinentales, por lo que situaron un portaaviones nuclear de la U.S. Army en la península de Corea.

4. Respuesta a la ONU

Justo después del desfile militar realizado en Pyongyang, el régimen opaco intentó efectuar un nuevo lanzamiento balístico, que fracasó. Como respuesta, la ONU los instó a que abandonaran sus ejercicios atómicos, pero dos horas después de la advertencia del ente internacional, Corea lanzó un nuevo misil que, de nuevo, no generó efectos al explotar antes de lo previsto, representando un nuevo intento de demostración de poder fallido.

Campo de trabajo de Buckchang, Corea del Norte, desde donde se lanzó el misil. Fuente: Google Maps.

5. Ciberataque global

En plena escalada de tensión entre los dos países, el 13 de mayo se vivió un ataque informático a escala internacional, que afectó tanto a países como a empresas privadas de todas partes.

En un primer momento, el ataque fue atribuido a hackers individuales, desvinculándolo del conflicto a la península de Corea.

Sin embargo, "The New York Times", después de consultar investigadores norteamericanos, decretó que el código usado en el ataque global era parecido al de los ataques informáticos que lleva a cabo el régimen de Corea del Norte, por lo que la sombra de sospecha y desconfianza sobre el país de Kim Jong-un siguió creciendo.

6. Nuevo misil

A pesar del ciberataque y su vinculación con Corea del Norte, el país asiático siguió adelante con su estrategia balística y de demostraciones de fuerza.

El 21 de mayo se realizó una nueva prueba nuclear, esta vez desde la ciudad de Bukchang, con un misil de alcance medio que acabó en el mar de Japón,

Este nuevo lanzamiento, aparentemente 'inocuo', no gustó a China, aliada de Jong-un, quien mostró su desacuerdo con la acción tomada.

7. Muerte del estudiante norteamericano encarcelado en Pyongyang

En un contexto marcado por la pérdida de aliados y el acercamiento de los EE.UU. a las fronteras de Corea del Norte, Otto Warmbier, estudiante norteamericano que fue encarcelado en Pyongyang y liberado en estado de coma, murió el 19 de junio.

A pesar de la polémica del caso, se desconocen los detalles, pero la muerte del joven estudiante generó una oleada de indignación popular, situándose la opinión pública a favor de la estrategia de Trump de seguir adelante en la escalada de tensión contra el régimen asiático.

8. Misil en el Mar de Japón

Durante el 4 de julio, los coreanos efectuaron una nueva prueba nuclear, lanzando un misil intercontinental desde el aeropuerto de Panghyon, en el noroeste del país.

Aeropuerto militar de Panghyon. Fuente: Google Maps.

Ante esta nueva prueba, Trump escribió en su Twitter: "Corea del Norte acaba de lanzar otro misil. Este tipo no tiene nada mejor a hacer con su vida"?.

A pesar de la aparente calma de Trump, el día siguiente de la prueba norcoerana, los Estados Unidos y Corea del Sur realizaron un ensayo con diferentes misiles cerca de las fronteras de Jong-un.

Este nuevo enfrentamiento estuvo marcado también por la postura de Vladimir Putin, presidente de Rusia, y Xi Jigping, líder Chino, quienes pidieron a las partes que apostaran por el diálogo, consejo que, como se ha visto, fue explícitamente desatendido.

9. "Sumergir los EE.UU. en un mar de fuego"

Un mes después de haberse vivido uno de los episodios más tensos del conflicto, el 6 de agosto el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó sanciones a Corea del Norte por valor de 1.000 millones de euros.

Delante de eso, los norcoreanos no permanecieron pasivos, y situaron el foco de atención sobre Trump y los Estados Unidos, afirmando que "el día en que los EE.UU. se atrevan a provocar nuestra nación con armas nucleares o con sanciones, el territorio norteamericano será sumergido en un inimaginable mar de fuego".

10. Amenaza en Guam e inicio de la fase más tensa del conflicto

El 9 de agosto, tres días después de que Corea amenazara a los Estados Unidos con el "inimaginable mar de fuego", Trump respondió al régimen asiático con que si Corea ataca, "se encontrará con fuego y furia".

Delante de eso, Kim Jong-un lanzó una amenaza más punzante que el anterior: atacar la isla de Guam.

Esta región, situada al Océano Pacífico y a 3.000 km Pyongyang, es parte de los Estados Unidos, y contiene bases militares, así como 4.300 soldados norteamericanos.

Distancia entre Pyongyand, capital de Corea del Norte, y Guam, isla de los Estados Unidos. Fuente: Google Maps.

La amenaza de Jong-un no gustó nada en el Pentágono, quién decretó con total seguridad que "las acciones de Corea del Norte seguirán siendo muy superadas por las nuestras y perderán toda carrera armamentística o conflicto que inicien".

Con esta situación, Kim Jong-un respondió con cierta cautela, instando a Washington a "desactivar la tensión y prevenir un peligroso conflicto militar".

11. Misil sobrevolando Japón

Una vez parecía que se había rebajado la tensión en el conflicto, el 29 de agosto Corea del Norte efectuó un nuevo lanzamiento balístico que sobrevoló Japón y acabó explotando en el Océano Pacífico.

Ante este hecho, el primer ministro japonés, Shinzo Abe, mostró su preocupación, afirmando que el hecho representaba una "amenaza grave y sin precedentes".

A la preocupación de los japoneses se sumó Trump, quien resaltó su apoyo al líder nipón y respecto Corea del Norte afirmó que "todas las opciones están sobre la mesa", así como la necesidad de "aumentar la presión" sobre Pyongyang.

Asimismo, Rusia mostró su "extremada preocupación" ante los hechos, y China afirmó que la crisis se encontraba en un "punto crítico".

12. Peligro de "convertirse en un conflicto a gran escala"

El 1 de septiembre, 5 días después de que Corea enviara el misil al Pacífico sobrevolando Japón, el Kremlin (gobierno ruso) emitió un comunicado en el cual Putin alertaba del peligro inminente de un "conflicto a gran escala" entre los Estados Unidos y Corea del Norte, instando las partes a recurrir al diálogo y a rebajar la tensión, en niveles máximos, existentes entre los dos países armados con misiles nucleares.

13. Rearme sin límites de Corea del Sur

El día siguiente que Putin alertara sobre el riesgo de un conflicto en "gran escalera|escala", Estados Unidos y Corea del Sur acordaron revisar el patrón balístico que establece un límite de abastecimiento de misiles, abriendo la puerta así a un reforzamiento ilimitado de Corea del Sur para hacer frente a un hipotético ataque norcoreano.

14. Prueba nuclear más potente hasta el momento

El último episodio vivido en esta escalada de tensión, reproches y ensayos nucleares ha sido el lanzamiento por parte de Corea del Norte de una bomba de hidrógeno, la sexta y más potente prueba nuclear llevada a cabo hasta ahora por parte de Kim Jong-un.

Kim Jong-un, líder de Corea del Norte, inspeccionando la bomba de hidrógeno. Foto: KCNA.

La bomba, que según Pyongyany tiene un "alto poder de destrucción", podría ser equipada en un misil intercontinental con un alcance de 10.000 km de distancia, capaz de llegar a los Estados Unidos y poder afectar a cualquier punto de Europa.

Área de alcance de un posible ataque intercontinental norcoreano.

Esta última prueba nuclear ha coincidido con el inicio de la Cumbre de los BRICS, en la que China y Rusia, aliadas de Corea del Norte, reforzarán su petición de apostar por el diálogo y el consenso con el fin de resolver este conflicto que podría derivar en el mayor conflicto nuclear de la historia.