El ejercido de los Estados Unidos ha abatido un nuevo objeto volador sobre su territorio desde el pasado día 4 de febrero, cuando se localizó el globo espía chino. El Departamento de Defensa de los Estados Unidos desconoce de momento el origen de los otros dos objetos voladores que ha encontrado en su espacio aéreo, así como otro que ha sido localizado en territorio canadiense y abatido por el ejército del Canadá.
En una comparecencia de prensa telefónica, la subsecretaria de Defensa y de asuntos Hemisféricos de los EE.UU., Melissa Dalton, ha explicado que tanto las autoridades estadounidenses como las canadienses han decidido abatir los objetos "por precaución", y ha recalcado que "no ha habido daños colaterales en ninguna de las operaciones de la última semana".
A estas alturas, las autoridades de los Estados Unidos no pueden confirmar que se trate de aparatos chinos, como el globo espía localizado al principio de mes, sin embargo, no descartan esta posibilidad. Desde que se localizó y se derribó el globo espía chino, el Departamento de Defensa de los Estados Unidos ha aumentado la vigilancia de su espacio aéreo, cosa que explica "en parte" el incremento de los objetos detectados los últimos días, ha dicho Dalton. La subsecretaria ha reconocido que es posible que haya muchos objetos sobrevolando el país, el propósito del cual no sea perjudicial, como pueden ser artefactos para la "investigación legítima", pero como no se ha podido identificar ninguno de los abatidos estos días, el presidente decidió su derribo "por precaución".
¿Globo u otros objetos?
El globo chino localizado el pasado 4 de febrero era, sin ningún tipo de duda, un globo. Sin embargo, las autoridades estadounidenses no han dado descripciones más fieles de los otros objetos voladores que han ido localizando y destruyendo. A pesar de todo, el general Glen VanHerck, jefe del Comando de Defensa Aeroespacial de Norteamérica, ha apuntado pueden ser artefactos "con algún tipo de globo en su interior" aunque también pueden estar movidos por un sistema de propulsión. En todo caso, se quiere mantener un velo de secreto.
VanHerck ha subrayado que no ha habido ningún acto "hostil" por parte de estos artefactos, pero si un objeto no identificado entra en el espacio aéreo norteamericano o canadiense intentarán siempre identificarlo y averiguar si es una amenaza. En este caso, los gobiernos del Canadá y los Estados Unidos discuten y valoran si puede suponer un riesgo para su seguridad nacional, por ejemplo, si sobrevuela zonas sensibles para la defensa como campos de silos de misiles, si puede afectar a la seguridad de la aviación civil o si puede suponer un riesgo para las personas en el suelo.
No se descartan teorías, ni siquiera extraterrestres
No se cierran vías de investigación, tanto es así, que al ser preguntado sobre si podrían tratarse de extraterrestres, VanHerck ha respondido: "Gracias por la pregunta. Dejaré que la comunidad de inteligencia y contrainteligencia lo averigüen "Yo no he descartado nada en este momento. Continuamos evaluando cada amenaza o amenaza potencial desconocida que se avecina en Norteamérica con la intención de identificarla.". Posteriormente, ha destacado el hecho de que justamente se les llama objetos y no globos por no descartar nada.