La Casa Blanca ha confirmado este viernes que ha parado "por completo" la ayuda militar que los Estados Unidos proporcionaba en Ucrania, a consecuencia de una falta de acuerdo en el Congreso para seguir dando apoyo a este país para hacer frente a la invasión rusa. Uno de los portavoces de la Casa Blanca, John Kirby, ha anunciado en rueda de prensa que "la ayuda que estábamos proporcionando hasta ahora se ha detenido por completo". El futuro de la ayuda que los Estados Unidos aportaba en Ucrania se decide en el Congreso, donde los demócratas tienen el control del Senado y los republicanos de la Cámara Baja. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha pedido al Congreso que apruebe una ayuda adicional de 55.586 millones de euros para Ucrania. La respuesta de la oposición republicana ha sido advertir que solo aprobará este nuevo paquete si los demócratas abren la puerta a implementar una serie de medidas en la frontera entre los Estados Unidos y México.
Ataques de Rusia con misiles balísticos
El portavoz de la Casa Blanca ha insistido a los republicanos en la necesidad de aprobar ayuda para Ucrania, sobre todo después de que los EE.UU. haya concluido que Rusia ha estado utilizando misiles balísticos norcoreanos en algunos de sus últimos ataques contra Ucrania. "Los ataques que están llevando a cabo los rusos solo están aumentando. Y ahora están utilizando misiles balísticos norcoreanos para llevar a cabo estos ataques", ha subrayado Kirby. Según ha relatado, Rusia disparó al menos uno de estos misiles balísticos hacia Ucrania el pasado 30 de diciembre, y también múltiples misiles balísticos norcoreanos el 2 de enero como aparte de otro ataque contra las infraestructuras de Ucrania.
Estos misiles formaron parte de los bombardeos con misiles y drones que Rusia perpetró contra Ucrania en los últimos días de 2023 y principios de este año, en lo que fue el ataque mayor desde el inicio de la guerra, en febrero de 2022. Los Estados Unidos, el proveedor más grande de ayuda militar a Ucrania, ha entregado a este país 44.200 millones de dólares en ayuda militar a Kyiv desde el inicio de la guerra, según datos del Departamento de Estado.
Congelación de la guerra
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, ha afirmado que si la guerra de Rusia contra su país se transforma en un conflicto congelado, eso permitirá en Moscú reclutar a una nueva generación de jóvenes rusos para que mueran como "carne de cañón" si los combates se reanudan. En una rueda de prensa en Letonia junto con su homólogo Edgars Rinkēvičs, Zelenski ha señalado que las guerras acaban, mientras que "los conflictos congelados no tienen final". Una situación en la cual se paraliza la guerra, sin llegar a resolverse, permitiría en Rusia alimentar a su población con narrativas y desinformación que justificaran reanudar de nuevo los combates más adelante. "Tenemos que evitar que Rusia vuelva a ser poderosa", ha advertido Zelenski en Riga.