El pasado miércoles, el presidente ruso, Vladímir Putin, sorprendió la población de Rusia y de todo el mundo con el anuncio de una "movilización militar parcial" del pueblo ruso. Esta medida suponía una escalda en el conflicto bélico con Ucrania y que la guerra por primera vez tocaba directamente en la puerta de centenares de miles de rusos. Hasta ahora, solo el ejército regular se había visto involucrado, pero desde lo mismo anuncio de Putin 300.000 reservistas rusos están en el punto de mira para ser desplegados a la guerra. La medida ha despertado la indignación y el pánico entre la población rusa. En las primeras horas, muchos reservistas se precipitaron a los aeropuertos para, los que pudieran pagará un pasaje, abandonar el país. Con unos precios disparados, otros han optado por buscar la manera de traspasar las fronteras. Sin embargo, a todos se les presenta la misma pregunta: ¿dónde ir? Pocos países, como Turquía y Armenia, siguen aceptando vuelos rusos y otros, como los miembros de la Unión Europea (UE), los cuales habían acordado cerrar las fronteras a los ciudadanos rusos.

Hace solo un par de semanas, al principio del mes de septiembre, la UE suspendió el acuerdo de visados con Rusia después de 15 años en funcionamiento. Fue una medida más de las sanciones europeas en Rusia por su invasión en Ucrania. Todo, da como resultado que cualquier ciudadano ruso se encuentra ahora con más dificultades para acceder a un país de la Unión, una complicación que se convierte en un infierno para los ciudadanos que ahora quieren huir del reclutamiento, según informa Público. Sobre la mesa de la Unión está el dilema: ¿se tiene que modificar la política de llegada de los ciudadanos rusos ahora que estos huyen de llamamiento del ejército? Si bien la UE en pleno no se ha pronunciado, si lo han hecho algunos Estados europeos.

Letonia no ha tardado en dejar clara su posición: no acogerá a los rusos que huyan de la movilización, según informa Al Jazeera. El ministro de Asuntos Exteriores de Letonia, Edgar Rinkevics ha afirmado: "Por motivos de seguridad, Letonia no emitirá visados humanitarios o de otro tipo a los ciudadanos rusos que evitan la movilización". De manera, que uno de los países más próximos a Rusia, ya ha dejado clara su postura de fronteras cerradas, incluso en este contexto. En el anuncio de letón de no ofrecer refugio a los reservistas que huyan se sumaron Lituania y Estonia. Sin embargo, estas naciones bálticas no cerrarían la puerta a disidentes y refugiados rusos, según informa DW.

Menos tajante ha sido la respuesta de Finlandia, uno de los grandes posibles destinos de esta diáspora de reservistas, las autoridades de las cuales han reconocido que es poco probable que acojan a reservistas que puedan escapar del país, según Al Jazeera. Sin embargo, han insistido en decir que sus sistemas de defensa se encuentran en buen estado.

Protestas en Rusia

Dentro de las fronteras rusas, el anuncio de Putin no ha sido bien recibido. En un país dónde protestar contra las políticas del gobierno comporta ciertos riesgos. Al menos 1.311 personas han sido detenidas en 38 ciudades rusas el miércoles después de saber la noticia de la movilización. Solo en San Petersburgo ha contabilizado 524 y en Moscú 502 y no se descarta que la cifra real sea más alta.

Protesta contra la movilización parcial de la población en Rusia / Efe