Los líderes europeos que han mantenido conversaciones de emergencia en Bruselas han acordado un aumento masivo del gasto de defensa, en medio de un esfuerzo por apuntalar el apoyo a Ucrania después de que Donald Trump detuviera la ayuda militar y el intercambio de inteligencia de los Estados Unidos. Eso ha pasado justo después de que el presidente francés, Emmanuel Macron, advirtiera el jueves por la noche que "la única potencia imperial que veo hoy en Europa es Rusia" y dijo de Vladímir Putin que es "un imperialista que busca reescribir la historia" después de que el presidente ruso pareciera compararlo con Napoleón Bonaparte. Macron también respondió a las reacciones rusas a su descripción de Moscú como una amenaza existencial para Europa, diciendo que el Kremlin estaba claramente molesto por el hecho de que se había descubierto el juego. Macron dijo que Rusia reaccionó como lo hizo en su discurso, advirtiendo que la agresión rusa "no conoce fronteras".
Viktor Orbán, el elemento discordante
La demostración de unidad europea se vio truncada por el hecho de que el primer ministro húngaro, Viktor Orbán, no dio apoyo a una declaración de la UE sobre la oposición de Ucrania a la postura negociadora favorable a Rusia de Trump. Los otros 26 líderes de la UE, incluido el aliado de Orbán, el primer ministro eslovaco Robert Fico, "apoyaron firmemente" la declaración. "No puede haber negociaciones sobre Ucrania sin Ucrania", decía la declaración, en respuesta al intento de Trump de marginar Europa y Kyiv.
El presidente del Consejo Europeo, António Costa, que convocó la reunión, dijo: "Hungría tiene un enfoque estratégico diferente sobre Ucrania, pero eso significa que Hungría está aislada entre los 27". Al llegar a la cumbre, Volodímir Zelenski, que originalmente estaba previsto que se uniera por vídeo, dijo: "Estamos muy agradecidos de no estar solos". Por otra parte, La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, que presentó a los líderes un plan de 800.000 millones de euros para aumentar el gasto de defensa europeo, dijo que era "un momento decisivo para Europa" y también para Ucrania.
Von der Leyen dijo más tarde a los periodistas que si Trump quería "paz a través de la fuerza", eso solo sería posible con la UE y sus Estados miembros "porque hay que cumplir las condiciones previas". Había "muchos ejemplos que mostraban cómo es de importante el apoyo de Europa para llegar a un final positivo", dijo, citando la ayuda económica y militar de la UE y el apoyo para mantener en funcionamiento el sistema energético de Ucrania. Antes, la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, había marcado el tono de la reunión: "Gastar, gastar, gastar en defensa y disuasión", había dicho. "Este es el mensaje más importante y, al mismo tiempo, por descontado, hay que seguir apoyando Ucrania, porque queremos la paz en Europa".
Zelenski siente el apoyo de Europa
Zelenski apretó la mano de los líderes y fue abrazado por diversos de los que estaban sentados en torno a la mesa|tabla al principio de la reunión. Fue un marcado contraste con la hostilidad de Washington, donde los funcionarios norteamericanos insistieron en la decisión de recortar el intercambio de inteligencia con Ucrania. El enviado norteamericano en Ucrania, Keith Kellogg, dijo que se había hecho para demostrar que los Estados Unidos hablaban de verdad sobre el fin de la guerra. Por otra parte, los líderes de la oposición ucraniana confirmaron que se habían reunido con miembros del séquito de Trump, pero negaron que estuvieran intentando sacar a Zelenski del poder.
Unión Europea: miles de millones en defensa
Durante la reunión extraordinaria, los líderes de la UE acordaron planos que podrían liberar miles de millones de euros para garantizar la seguridad de Europa, impulsar el gasto de defensa y apuntalar el apoyo a Kyiv. El brazo ejecutivo de la UE presentó a los líderes una propuesta que podría movilizar hasta 800.000 millones de euros para reforzar la defensa en el continente. Parte del plan de rearme proporcionaría a los países préstamos por un total de hasta 150.000 millones de euros.
Paralelamente, en una declaración conjunta de la cumbre de líderes de la OTAN celebrada el año pasado en Washington, se afirmaba que Rusia sigue siendo la amenaza más importante y directa a la seguridad de la OTAN. En los ojos de sus aliados, Trump está poniendo a rodar este tema central. El jueves, Trump volvió a sugerir que los Estados Unidos podrían abandonar sus compromisos con la alianza de seguridad –un pilar clave de la seguridad occidental contra el riesgo de un ataque ruso–, diciendo que los países miembros no estaban gastando bastante en defensa. "Creo que es cuestión de sentido común. Si no pagan, no los defenderé", dijo Trump. Al núcleo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y consagrada en el artículo 5 del tratado está la promesa de defensa colectiva: un ataque a un país miembro es un ataque a todo el mundo.
Europa no quiere quedarse fuera de las conversaciones de paz con Ucrania
Mientras los líderes europeos expresaban el apoyo casi unánime a Ucrania, la presidenta de la Comisión Europea, Von der Leyen, advirtió que las negociaciones de paz solo serían posibles con el apoyo de Europa. De los 27 líderes de la UE presentes en Bruselas, todos menos uno firmaron un texto que pide un acuerdo de paz que respete "la independencia, soberanía e integridad territorial de Ucrania", a la vez que incluye Ucrania a las negociaciones. Viktor Orbán se abstuvo.
Macron había esbozado un plan para un cese del fuego de un mes a "la infraestructura aérea, marítima y energética" en Ucrania, que podría allanar el camino para un acuerdo de paz más duradero. Pero advirtió que los aliados "tienen que evitar un alto el fuego discutido precipitadamente". Y que Ucrania retire su candidatura a la OTAN sin una garantía de seguridad como condición para cualquier alto el fuego es "obviamente inaceptable", añadió. Zelenski dijo que "está preparando propuestas prácticas" para poner fin a la guerra con los líderes europeos. El primer paso sería que Rusia detuviera los ataques aéreos contra la infraestructura energética y civil y detuviera "todas las operaciones militares en el Mar Negro", publicó Zelenski en X.
El presidente ucraniano decía esta semana que “la guerra debe acabar cuanto antes”. Además, exponía que “Ucrania está preparada para trabajar las 24 horas del día con nuestros socios en Estados Unidos y Europa por la paz” y por este motivo ha confirmado que visitará Arabia Saudí la próxima semana para reunirse con el príncipe heredero, Mohammed bin Salmán. Una delegación del país eslavo se quedará en Riad para verse con sus homólogos estadounidenses para mantener conversaciones tras el incidente en el Despacho Oval, según ha avanzado Euronews.
Rusia no quiere tropas de países europeos en Ucrania
Maria Zajárova, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, rechazó la propuesta de alto el fuego de un mes y dijo que la idea de que se desplieguen tropas de paz europeas en Ucrania sería "inaceptable". El ministerio afirmó que la "normalización" de las relaciones entre Rusia y los Estados Unidos "está causando pánico" en Europa.
El ministro de Exteriores de Rusia, Serguei Lavrov, dijo esta semana que Moscú no permitirá el despliegue de un contingente europeo en Ucrania en el marco de las negociaciones de paz. "Eso significará, no una híbrida, sino una participación oficial y no disimulada de los países de la OTAN en la guerra contra Rusia. No podemos permitir que eso pase", aseguraba el jefe de la diplomacia rusa, en una rueda de prensa conjunta con su homólogo de Zimbabue, Amon Murwira. Lavrov ha asegurado que, independientemente de la bandera que lleven los efectivos desplegados en Ucrania, "seguirán siendo tropas de la OTAN". "Nosotros, categóricamente, no nos quedaremos con los brazos cruzados", ha remarcado. Según Lavrov, "no hay lugar para compromiso" en el asunto del despliegue de tropas occidentales en Ucrania.