En un duro editorial en el diario minoritario de izquierdas israelí Haaretz, el ex primer ministro de Israel, Ehud Olmert, ha culpado este miércoles Netanyahu tanto de buscar una guerra con Hizbulá en el Líbano, como de haber abandonado a los rehenes israelíes o estar alargando el conflicto en Gaza "sin objetivos precisos" para las tropas. "Cada día extra que este hombre maldito sigue asumiendo la responsabilidad nominal del funcionamiento del Estado es un día que plantea un peligro concreto para el futuro y la existencia (...)", ha destacado el exmandatario al final de su editorial y que recoge Efe, que es una acusación directa contra las políticas de Netanyahu.

"Netanyahu quiere destruir Israel, ni más ni menos. Ha llegado el momento de expulsarlo", exige Olmert, igual que lo hacen cada sábado miles de israelíes que, desde hace meses, salen a las calles contra el gobierno y a favor de un acuerdo por la liberación de los 120 rehenes que siguen en Gaza. Olmert, ve muy crítica contra la gestión del actual mandatario, comandó el país entre el 2006 y el 2009, años antes de ingresar en la prisión por corrupción a causa de acciones anteriores durante su tiempo como alcalde de Jerusalén (1993-2003).

Netanyahu fijó un "objetivo imposible"

La negativa de Netanyahu de "alcanzar un acuerdo que permita a todos los rehenes volver a Israel se basa en el argumento que impediría una victoria total sobre Hamás. Pero la victoria total ahora no es una opción, igual que no lo era desde el día que el primer ministro (Netanyahu) la introdujo por primera vez", dice Olmert.

Según su opinión, Netanyahu fijó un "objetivo imposible" para poder responsabilizar de su fracaso las fuerzas armadas, contra los que dice "disemina veneno, incitación, desprecio y un intento de esquivar la confianza del pueblo de Israel en los comandantes que dirigen las fuerzas". Con respecto al territorio palestino ocupado de Cisjordania, donde las incursiones militares y ataques de colonos contra palestinos se han disparado desde el ataque de Hamás a octubre, Olmert ha acusado Netanyahu de "tomar medidas deliberadas destinadas a provocar un estallido generalizado de violencia en Cisjordania", perpetrado por "milicias privadas formadas por requesones con armas" que les fueron entregadas por el ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir.

Desde el 7 de octubre al 10 de junio, unos 520 palestinos, entre ellos más de un centenar de niños, han muerto a Cisjordania, incluido Jerusalem Est, la mayoría a batidas israelíes, pero una decena también en manos de colonos. Además, en este mismo periodo, la ONU registró 968 ataques de colonos contra palestinos, la mayoría causante daños en sus propiedades como olivares, ganado, campos y viviendas para expulsarlos.