La reina Isabel II esquivó un posible intento de asesinato por parte de simpatizantes nacionalistas irlandeses durante una visita a Estados Unidos el año 1983, según han revelado unos documentos clasificados del FBI. Los archivos muestran cómo las autoridades se prepararon contra las amenazas de los partidarios del Ejército Republicano Irlandés Provisional (IRA) y se hicieron públicos como resultado de las solicitudes de la libertad de información que se presentaron después de la muerte de la reina Isabel II, el pasado 8 de septiembre.
La posible amenaza de asesinato se conoció la noche anterior que la reina llegara a San Francisco en 1983, cuando un agente de la policía advirtió a los agentes federales sobre un posible ataque. El oficial que dio la voz de alerta bebía regularmente en un pub irlandés y les advirtió sobre un simpatizante del IRA que estaba decidido a vengar la muerte de su hija. El 4 de febrero de 1983, aproximadamente un mes antes de la visita de la monarca, recibió una llamada de un hombre que conocía el pub, que afirmaba que "su hija había sido asesinada en Irlanda del Norte por una pelota de goma", según destapa el diario británico Daily Mail. La llamada se produjo un mes antes de la llegada de la reina Isabel II y el príncipe Felipe en los Estados Unidos para reunirse con el presidente Ronald Reagan y la primera dama Nancy Reagan.
Los intentos de asesinato contra Isabel II en EE. UU.
El intento de asesinato forma parte de una gran publicación de más de 100 páginas de documentos relacionados con la difunta monarca. Los documentos apuntan que el hombre reconoció al oficial que tenía previsto "intentar hacer daño" a la reina tirando "un objeto" delsde el puente Golden Gate al yate real Britannia mientras ella navegara. Otra de las opciones que contemplaba era matarla durante una visita al parque nacional de Yosemite. Los mismos documentos también demuestran que el hombre había sido involucrado anteriormente en investigaciones policiales y se lo describió como "generalmente cooperativo, a pesar de no esconder sus simpatías por el IRA.
Los documentos desclasificados también revelan que los agentes del FBI ya advirtieron antes de la visita de la dificultad en prever y prevenir incidentes "que puedan avergonzar a la reina o al presidente". A pesar de que, esta amenaza no era la primera vez que el FBI advertía de posibles ataques a la reina. Justo dos años antes, en 1981, el FBI ya advirtió de un posible ataque contra Isabel II cuando visitó Boston y Nueva York. Aparte, otro documento de 1989 advertía de "la posibilidad de amenazas contra la monarquía británica está siempre presente por parte del ejército republicano irlandés". Además, aportaba más detalles sobre las medidas de seguridad: "Se les pide a Boston y Nueva York que se mantengan alerta ante cualquier amenaza contra la reina Isabel II por parte de los miembros del IRA y que les proporcionen inmediatamente a Louisville".