Los fiscales han retirado los cargos por una presunta agresión sexual en 2016 en contra del actor Kevin Spacey, días después de que el joven que lo había acusado desistiera de manera definitiva de los señalamientos, han informado medios locales.
El fiscal del distrito de Cape & Islands, Michael O'Keefe, ha señalado, según documentos difundidos por medios locales, que presentaba un "Nolle prosequi", un término legal que equivale a "no estar dispuesto a perseguir", debido "a la falta de disponibilidad del testigo".
El pasado 5 de julio, un joven que había acusado a Spacey de agresión sexual, retiró los cargos en el juicio civil que se desarrollaba en un tribunal de Massachusetts.
El joven que había presentado la acusación, que es hijo de la periodista de la cadena de televisión WCVB Heather Unruh, denunció que en julio de 2016 el actor, galardonado con dos premios Óscar, le metió la mano en sus pantalones dentro de un bar en Nantucket.
El supuesto incidente ocurrió cuando el acusador tenía 18 años de edad y el período de prescripción del presunto delito vencía en la misma semana en la que demandante tomó la decisión. Pero Spacey, de 59 años de edad se declaró en enero pasado inocente de los cargos.
En una comparecencia inesperada ante el tribunal el 3 de junio, Spacey defendió su inocencia y sus abogados instaron al juez a que exigiera una copia forense "completa e inalterada" de los datos del teléfono del denunciante, ya que contendría mensajes y fotografías que probarían su inocencia.
Después de eso, los abogados defensores y la Fiscalía se enfrascaron en una disputa en torno al teléfono del acusador que, al parecer, se había perdido. Según la denuncia del joven, él empezó a hablar de manera amistosa con Spacey en el bar en el que trabajaba, y mintió sobre su edad al asegurar que tenía 23 años en lugar de 18.
El camarero explicó a la Policía que Spacey le compró varias bebidas alcohólicas -la edad mínima para beber alcohol en el estado de Massachusetts es 21 años-, y le insistió varias veces para que fuera a su casa hasta que, más tarde, acarició su muslo y desabrochó sus pantalones, frotando su pene durante unos tres minutos.
El joven ha dicho que no sabía qué hacer porque no quería meterse en problemas por beber sin tener la edad permitida y publicó una grabación de parte del presunto roce sexual en la red social Snapchat. Spacey afrontaba una pena de hasta dos años de prisión si era declarado culpable.