El intento de neutralizar en el Senado de los Estados Unidos la sentencia del Tribunal Supremo de que suprimirá el derecho al aborto ha fracasado. Los senadores demócratas no han conseguido este miércoles los votos suficientes para sacar adelante un proyecto de ley que pretendía proteger el aborto a nivel federal. La iniciativa naufragó en una votación clave, ya que los demócratas no consiguieron los 60 apoyos necesarios para que comenzara a ser debatida en el Senado.
La vicepresidenta de EE UU, Kamala Harris, presidía la sesión en que los 50 senadores republicanos votaron en bloque en contra de la iniciativa, mientras que los demócratas uno por uno fueron votando a favor. El único demócrata que rompió filas con su partido fue Joe Manchin, el último en votar y quien dejó el marcador en 49 votos a favor y 51 en contra. La votación se produjo en un clima de alta tensión después de que la semana pasada Politico publicara un borrador de un fallo del Tribunal Supremo que apunta a la revocación del derecho al aborto que ese tribunal consagró en la histórica sentencia Roe contra Wade en 1973.
Condenada a fracasar
La filtración del borrador de la sentencia puso a los demócratas a la defensiva, ya que la derogación de Roe contra Wade permitiría a los republicanos restringir e incluso eliminar ese derecho aprobando leyes en los parlamentos estatales. "La votación de hoy es una de las más importantes que celebraremos en décadas", afirmó antes del voto el líder de los demócratas en la Cámara Alta, Chuck Schumer. Schumer había impulsado la votación con el objetivo de obligar a los senadores a posicionarse públicamente pese a que tenía pocas probabilidades de salir adelante. Actualmente, el Senado está dividido por la mitad con 50 escaños para los republicanos y 50 para los demócratas, quienes detentan la mayoría gracias al voto de desempate Harris, que ejerce como presidenta de la cámara.
La tensión reinó en la votación, con los senadores republicanos mostrando en el hemiciclo fotos de bebés y dando discursos incendiarios, mientras que en los pasillos las legisladoras de la Cámara Baja marchaban al grito de: "¡Mi cuerpo! ¡Mi decisión!". También había un gran dispositivo de seguridad alrededor del Tribunal Supremo y el Congreso, al tiempo que en su interior patrullaban agentes con perros por los pasillos.
Llamamiento de Biden
El demócrata Schumer insistió en que habrá consecuencias reales e inmediatas si el Tribunal Supremo anula Roe contra Wade. En concreto, si el Tribunal Supremo anula la protección al aborto, 26 de los 50 estados de EE UU tomarán medidas para restringirlo. Eso implicaría que aproximadamente la mitad de las mujeres en edad reproductiva de Estados Unidos, unos 36 millones, se quedarían sin acceso a ese servicio en el territorio donde viven, según cálculos de Planned Parenthood, la mayor red de clínicas de salud reproductiva de Estados Unidos.
La vicepresidenta, Kamala Harris, lamentó el resultado de la votación: "Tristemente, el Senado hoy no ha defendido el derecho de una mujer para tomar decisiones sobre su propio cuerpo". En un comunicado tras la votación, el presidente de EE UU, Joe Biden, urgió a los estadounidenses a elegir en las próximas elecciones a legisladores que protejan el derecho al aborto.