Las autoridades griegas han detenido a 13 personas este sábado después de que los fuegos artificiales lanzados desde un yate hayan provocado un incendio forestal en la isla de Hidra, situada en el sur de Atenas. La pirotecnia quemó el único bosque de pinos de la isla, "en un lugar de difícil acceso y sin carretera", ha explicado el equipo de bomberos de la ínsula a través de un comunicado en redes. El incendio ya se ha controlado, si bien la operación ha sido complicada porque los bomberos han tenido que llegar al pinar por vía marítima y con helicópteros para lanzar agua. El alcalde de la isla, Giorgos Koukoudakis, ha expresado su "indignación" y ha prometido acciones legales contra los responsables.

Según el comunicado emitido por las autoridades de la isla, los trece detenidos serán presentados delante de la fiscalía este domingo, si bien no han dado más detalle sobre la identidad de los sospechosos más allá del hecho de que son de nacionalidad griega. Estos podrían enfrentarse apenas de hasta 20 años de prisión y multas de hasta 200.000 euros, ya que Grecia ha endurecido sus penas por incendios provocados a raíz de los numerosos casos de piromanía que se han dado en  los últimos años —el verano pasado se detuvieron 79 personas por causar incendios—. De momento, los detenidos están recibiendo la rabia de las redes, que se han llenado de mensajes críticos.

Decenas de incendios y altas temperaturas

Este nuevo incendio producto de la irresponsabilidad coincide además con una época de incendios generalizados en el inicio del verano, con decenas de focos en entornos forestales por todo el archipiélago y la península que conforman Grecia durante esta semana y que han dejado al menos un muerto. Se trata de un hombre de 55 años, bombero voluntario, que se desplomó mientras luchaba contra las llamas cerca de su casa, en la región de Elia. Protección Civil ha pedido extrema precaución por el riesgo "muy alto" de incendios, especialmente a la región de Ática, la península del Peloponeso y el centro de Grecia.

El sábado pasado hubo otro incendio en la isla de Andros, donde se tuvieron que evacuar cuatro poblaciones y se tuvieron que movilizar aviones y helicópteros para mitigar las llamas lanzando agua. Una situación que se agravó por las fuertes ventoleras que soplaron durante tres días. Y ahora, el verano se prevé adverso, dadas las altas temperaturas y el peligro de sequía. Este pasado ha sido el invierno más cálido registrado de la historia del país y la semana pasada ya hubo la primera ola de calor del año, con temperaturas por encima de los 44 grados en algunos puntos.