La primera ministra de Italia, Giorgia Meloni, ha condenado un acuerdo para repartir los principales puestos de la UE entre los principales partidos proeuropeos, diciendo que ignoraba el giro hacia la derecha del bloque. En un airado discurso, destaca el The Guardian, ante el parlamento italiano, Meloni ha puesto de manifiesto que el acuerdo sobre los altos cargos reflejaba la opinión que "los ciudadanos no son lo bastante maduros para tomar ciertas decisiones" y había sido adoptado por los que creen "que la oligarquía es básicamente la única manera aceptable de democracia".

Seis líderes europeos, entre ellos el francés Emmanuel Macron, el alemán Olaf Scholz y el polaco Donald Tusk, han confirmado el martes un plan para nominar la política de centroderecha Ursula von der Leyen para un segundo mandato como presidenta de la Comisión Europea y dividir de otros dos lugares clave entre los socialistas y liberales.

Las quejas de Meloni

Reunidos antes de una cumbre de la UE jueves, los seis líderes, entre los cuales también había los primeros ministros de España, los Países Bajos y Grecia, han sido los principales negociadores que representaban el Partido Popular Europeo de centroderecha, los socialistas y los liberales, que juntos poseen 55% de los escaños en el nuevo Parlamento Europeo.

Meloni es la presidente de los Conservadores y Reformistas Europeos, que se ha convertido en el tercer grupo más mayor del parlamento, mayor que el grupo liberal Renew de Macron. Pero el euroescéptico ECR ha quedado fuera del acuerdo altos cargos.

"El tercer grupo [más grande] actualmente es un grupo que no gusta a los que toman las decisiones", ha destacado Meloni, calificando la UE de "gigante burocrático" cuyas decisiones estaban dictadas por la ideología.

Ha destacado que su coalición de gobierno, encabezada por el partido Hermanos de Italia, obtuvo casi el 53% de los votos europeos a Italia, mientras que los partidos de gobierno en Francia obtuvieron solo el 16% y Alemania el 32%. A pesar de la frustración de Meloni, su gobierno nunca ha presentado a un candidato claro para ninguno de los tres puestos en juego esta semana, constata el mismo periódico.

Fuentes diplomáticas han dicho que Meloni ya había acordado con el primer ministro de la República Checa, Petr Fiala —el único otro líder del ECR en la mesa de la cumbre de la UE— apoyar la elección de altos cargos, siempre que ambos países consiguieran la adjudicación de alguno de ellos en la próxima Comisión Europea.

Meloni busca apoyos para el boicot

La crítica de Meloni se hace eco de la del primer ministro húngaro, Viktor Orbán, que afirmó que el acuerdo entre el partido mayoritario "sembró las semillas de la división". Igual que Meloni, los eurodiputados de Orbán están fuera de los grupos proeuropeos, pero los dos líderes euroescépticos no han podido acordar unir fuerzas, cosa que ha mitigado su oposición.

A pesar de la irritación de Meloni y la oposición abierta de Orbán, se espera que la mayoría de los líderes de la UE que se reunirán el jueves confirmen el acuerdo, cosa que también convertiría Kaja Kallas de Estonia en la líder de la diplomacia del bloque y a António Costa de Portugal en presidente del Consejo Europeo.

Orbán ya ha dicho que no dará apoyo a Von der Leyen; Meloni no ha dejado clara su postura, pero el diario italiano La Stampa informó de que es probable que se abstenga.