Las autoridades alemanas han confirmado las informaciones avanzadas por los medios de comunicación del país, y han asegurado que Taleb Abdul Mohsen, detenido como autor del atropello masivo en el mercado de Navidad de Magdeburgo, no es un terrorista yihadista, sino todo lo contrario, un individuo "claramente islamófobo". A pesar de las múltiples incógnitas alrededor de este ataque, que ha dejado cinco muertos y 200 heridos, la ministra federal del Interior, Nancy Faeser, ha aseverado: "Solo podemos decir a ciencia cierta que el autor era claramente islamófobo".

Arabia Saudita habría advertido a las autoridades alemanas sobre el individuo

Faeser ha descrito el atropello masivo de Magdeburgo como un crimen terrible. "Es un acto que afecta profundamente a toda Alemania", ha señalado, y ha añadido que están trabajando "duro" para esclarecer todas las circunstancias del crimen. Aunque las autoridades no han dado detalles oficiales sobre la identidad del perpetrador del ataque, los medios han construido un perfil del individuo a partir de fuentes extraoficiales. Abdul Mohsen es un psiquiatra de 50 años, originario de Arabia Saudita, que cuenta con un permiso de residencia permanente en Alemania, a donde llegó en 2006, porque fue reconocido como refugiado en 2016. Trabajaba en una clínica en Bernburg, una pequeña localidad de 32.000 habitantes a unos 50 kilómetros de Magdeburgo, pero según apunta el diario Die Welt, habría estado de baja en el último mes.

Fuentes cercanas al gobierno de Arabia Saudí, país de origen del presunto atacante, han asegurado a la CNN que habían enviado múltiples avisos a las autoridades alemanas sobre el riesgo que representaba Abdul Mohsen. Hace un año, las autoridades saudíes advirtieron a sus homólogos alemanes sobre la tendencia radical del detenido, ya que se presentaba como un activista crítico con el Islam y se definía a sí mismo como "exmusulmán". Además, entre 2007 y 2008 reclamaron su extraditación, lo que Alemania rechazó. La ministra Faeser no ha valorado personalmente el peso de estas informaciones. "Qué advertencias hubo o no con antelación es responsabilidad de las autoridades investigadoras", ha dicho en referencia a la Oficina Federal de Investigación Criminal (Bundeskriminalamt) que está llevando las investigaciones.

Conocido por las autoridades

Abdul Mohsen era conocido por las autoridades hasta el punto que, un día antes del atentado, tenía que comparecer ante un tribunal de Berlín, pero no se presentó. El motivo de la causa fue una llamada que el detenido hizo al número de emergencias de los bomberos de la capital alemana sin que hubiera ninguna emergencia. El magistrado le aplicó una multa de 600 euros a Abdul Mohsen, que se negó a pagar, hecho por el cual fue citado por el tribunal este jueves.