Los partidos de la coalición de gobierno en Italia, formada por los ultraderechistas Hermanos de Italia y la Liga, junto con los conservadores Forza Italia, han mostrado este lunes sus divisiones ante los futuros pactos para las elecciones europeas del 2024 y la relación con la política francesa Marine Le Pen, líder de la Agrupación Nacional, una formación de extrema derecha. Las diferencias entre los partidos han quedado patentes a través de los dos vicepresidentes de la primera ministra, Giorgia Meloni: Matteo Salvini, líder de la Liga y próximo a Le Pen, y Antonio Tajani, ninguno de Forza Italia y partidario de formar un gran grupo conservador-liberal europeo sin ultranacionalistas.
Este domingo, Salvini anunció que este lunes recibiría en Roma a la líder de la Agrupación Nacional, Marinne Le Pen, pero la reunión ha tenido que ser "pospuesta" a causa de la "grave situación en Francia" provocada por los disturbios de la última semana, según fuentes del partido italiano. El encuentro, a pesar de no haberse llevado a cabo, ha servido por revivar las divisiones o, como mínimo, las diferentes visiones que tienen los tres partidos que conforman el gobierno italiano, respetos a los pactos europeos con fuerzas ultranacionalistas, como Le Pen o Alternativa por Alemania.
Antonio Tajani, quien lidera el partido Forza Italia después de la muerte de Silvio Berlusconi, ha afirmado que sería "imposible" llegar a ningún acuerdo con formaciones euroescépticas como Alternativa por Alemania (AfD) o la Agrupación Nacional de Le Pen. No obstante, ha aceptado "encantado" la inclusión de la Liga de Salvini, aunque actualmente los tres forman parte del Grupo Identidad y Democracia (ID) en el Parlamento Europeo. ¿"Realmente el amigo Tajani prefiere seguir gobernando con los socialistas y Macron? La Liga trabaja para cambiar Europa e iniciar, finalmente, un proyecto de derecha unido después de años de mal gobierno de las izquierdas", han afirmado los portavoces de la Liga en el Parlamento Europeo, Marco Zanni y Marco Campomenosi, en respuesta a las afirmaciones de ANtonio Tajani. Además, han añadido: "No es el momento de dictar condiciones ni de decidir anticipadamente a quien excluir del proyecto de la derecha europea".
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, quien lidera en Europa el partido de los Conservadores y Reformistas (ECR), igual que Vox, se ha limitado a describir el acuerdo entre populares y socialistas en el Parlamento Europeo como "antinatural" en una entrevista con "Il Corriere della Sera". Por su parte, Nicola Danti, eurodiputado de Italia Viva y vicepresidente de Renew Europe (liberales), ha resumido las posturas de los tres partidos derechistas italianos como un "caos". Salvini quiere estar a cualquier precio con Le Pen. Tajani promueve un matrimonio entre Meloni y los Populares, pero también con Salvini, pero sin Le Pen. Solo les preocupa tener cargos", ha afirmado Danti.
Así pues, la coalición de gobierno en Italia se enfrenta a un desafío interno mientras busca establecer una estrategia común para las elecciones europeas y definir su posición en relación con Marine Le Pen y otros partidos de derecha en Europa. Habrá que ver si las desavenencias con los pactos europeos se trasladarán después a territorio italiano donde, hasta el momento, la coalición de derecha y ultraderecha no ha dado muchos síntomas de desgaste.